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Severo Almansa, pintando en el Museo Gaya. Abajo, fragmento de su obra 'Lirios ante la ventana'.
«Me pego porrazos contra las farolas»

«Me pego porrazos contra las farolas»

Severo Almansa Pintor y diseñador gráfico. El artista participa en el Museo Gaya, en el ciclo 'Diálogos', con su obra 'Lirios ante la ventana'

Antonio Arco

Miércoles, 21 de enero 2015, 11:29

Le mando un mensaje a Severo Almansa (Murcia, 1948), pintor, diseñador de prestigio y fructífera trayectoria, cabeza y alma en llamas, personaje explosivo, divertido, agotador, culto, imprevisible, poseedor de un notable buen gusto y padre de cuatro hijos -de tres madres distintas-. Arrollador, se afeita con cuchilla y sin crema, se mete en cada lío que arde Troya, y jamás pasa inadvertido. Su pintura casi es aire.

-«¿Podríamos quedar a las 09.00 horas, para tomar un café y hablar de su participación en el ciclo 'Diálogos' en el Museo Gaya?».

-[Respuesta inmediata desde su recién estrenado iPhone 6] «¿Se refiere a las 09.00 de la mañana? Mi calle no la saca el Ayuntamiento hasta las 12.00 o así. Además, a las 11.00 está de noche aún».

Severo Almansa, para su participación en 'Diálogos', ciclo en el que un pintor realiza una obra a partir de otra de Ramón Gaya, ha tenido que vérselas con 'Rosas', un 'gouache' sobre papel, de 30 x 45 centímetros, que el autor de 'Velázquez, pájaro solitario' pintó en 1990. No son unas rosas en todo su esplendor, sino en sus últimos suspiros, aunque conservan una belleza que arropa. Unas rosas que se podrían contemplar mientras se escuchan estos versos de Francisco Brines, uno de los grandes admiradores del creador murciano, recogidos en su poemario 'El otoño de las rosas': «Vives ya en la estación del tiempo rezagado: lo has llamado el otoño de las rosas. Aspíralas y enciéndete. Y escucha, cuando el cielo se apague, el silencio del mundo». Ante ellas, de la mano de Severo Almansa han surgido unos lirios, esta vez sí que en todo su esplendor, que habitan una obra de una sencillez, una armonía y una calma envidiables. Una obra casi invisible, sin aristas, nada invasiva, ni petulante, ejecutada con precisión, sin temblor de duda. Se titula 'Lirios ante la ventana', y la realizó en 2014 empleando tinta china, acuarela y 'collage' sobre papel (57 x 77 centímetros). Podrá verse hasta el 31 de enero.

-¿No le gusta madrugar? [Ya estamos en la Plaza de las Flores]

-Es que no me duermo antes de las cinco de la mañana. He intentado hacerlo antes pero no hay manera: incluso he llegado a ver el 'Teletienda', a ver si de la desesperación me quedo roque, pero un pijo como un botijo. Una de mis exmujeres...

-...¡ah!

-...me dio una especie de somníferos, se supone que buenísimos, que cuando me los tomaba me dejaban todavía con los ojos más abiertos. Pero, bueno, ¿y a usted qué le importa todo esto?

-A mí nada, es usted el que lo está contando. Sabe que, conociéndole, sorprende mucho que su obra no sea...

-...¿más violenta?

-O más rotunda; una obra, una explosión. Sin embargo, es de una delicadeza que invita al espectador al sosiego.

-Mucha gente piensa que yo tengo una personalidad primitiva.

-¿Y le extraña?

-No, aciertan. Puede que me redima de que así sea, de alguna manera, haciendo una obra, digamos, poética. Siempre he dicho que Severo Almansa pintor está muy celoso de Severo Almansa diseñador. Suponiendo que yo haya conseguido algo en el campo del diseño [en el 2000, por ejemplo, fue seleccionado para exponer en el Reina Sofía dentro de la muestra 'Signos del Siglo], es gracias a que llegué a él de la mano de las bellas artes. Esa educación plástica a mí me ha servido mucho a la hora de acometer los trabajos de mi estudio. La limpieza configura mi estilo, también en mis retratos. Soy contenido. Los artistas configuran su estilo del siguiente modo: un 50% con sus habilidades, y otro 50% con sus carencias. Yo las tengo, como todo el mundo, y las reconozco. Me doy cuenta de que no debo ser excesivo a la hora de pintar. Sé parar a tiempo, qué capullos.

-¿Y en su día a día también sabe parar a tiempo?

-También intento ser comedido, aunque ya sé que cuesta trabajo creerme. No aguanto la agresión; y cuando me agreden, se enteran. Después me arrepiento, porque dicen que es una forma de civilización el ser contenido, pero yo no lo soy. Y ahora es peligroso, porque una cosa es tener 40 años, y otra tener los que yo tengo. Así es que lo intento...

-¿La 'fiera' se está aplacando?

-No, la 'fiera' sigue siendo 'fiera'. No se va calmando, y menos todavía con lo que está cayendo en la calle. A la 'fiera' le llega el desencanto', a la 'fiera' le llegan las dudas, a la 'fiera' intentan joderle la vida. Temores no tengo, porque eso del miedo, de momento, no va conmigo.

-¿Cómo ve la calle?

-La mezcla de políticos y banqueros ha sido terrible. Nos han asaltado, a los ciudadanos, y lo hemos consentido. A mucha gente le han arruinado la vida. No tengo consuelo para esta debacle. Algunos amigos me dicen, 'bueno, tú por lo menos te abstraes pintando'. ¿Qué cojones? Pintando no te abstraes, pintando sufres. Las que se abstraerán pintando serán sus suegras los domingos, que no niego que se lo pasen de puta madre. De hecho, a los jubilados les da por dedicarse a pintar, y no por estudiar vulcanología.

-¿Disfruta paseando por Murcia?

-Me pego porrazos contra las farolas cuando veo los desastres estéticos de esta ciudad, el mal gusto con el que se están fastidiando las plazas, con toldos a cual más feo y sombrillas espantosas. Ahora, a cualquier cosa se le llama diseño, a cualquier cosa se le llama arte, y a cualquier imbécil le dan responsabilidades que nos afectan a todos. Mire, la comodidad visual es tan importante como la comodidad física. Si estás sentado en una silla cómoda, pero horrorosa, no te sientes cómodo; y si estás sentado en una silla bella, pero incómoda, tampoco. A mí me flipa todo lo que rezuma calidad máxima en su ejecución.

Severo Almansa estará todas las tardes, de miércoles a sábados y de 18.00 a 20.00 horas, pintando sobre sus dibujos editados que el Museo dispondrá para su venta a 50 euros la unidad. Las intervenciones serán con acuarelas sobre papel Arches de 250 gramos. Por otro lado, el 27 de enero, el artista protagonizará, junto al periodista y poeta Antonio Parra, una conferencia-coloquio que, sin duda, promete.

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