La Consejería ve «inviable» reducir las guardias de los médicos de 24 a 17 horas

El consejero de Salud, Juan José Pedreño, ve «inviable» la reducción de las guardias médicas de 24 a 17 horas, una medida que el Ministerio de Sanidad puso sobre la mesa tras las reclamaciones de una parte importante de la profesión que considera anacrónico el actual modelo. «Nosotros estamos de acuerdo en mejorar las condiciones laborales de los profesionales, pero el problema serio que tenemos en este país es el déficit de médicos. Reducir el horario de guardias supone un incremento de plantillas», señaló Pedreño este lunes a preguntas de los periodistas, durante una visita al Hospital Morales Meseguer. «Hay que tener claro que el déficit de facultativos en muchísimas especialidades haría inviable, ahora mismo, llevar a cabo» la medida, advirtió. «Ni en la Región de Murcia ni en toda España», apostilló.

«No hay profesionales suficientes para cubrir ahora mismo esas necesidades [las que surgirían con la reducción del horario de las guardias], por eso insistimos mucho en que el déficit de profesionales condiciona este tipo de medidas», continuó Pedreño. A juicio del consejero, y dada la falta de plantilla, reducir el horario de las guardias solo conduciría a «una sobrecarga» de los profesionales. En todo caso, apeló al «consenso» entre comunidades para estudiar «las condiciones laborales con las que se van a ajustar esos horarios». 3.000 médicos realizan guardias en el Servicio Murciano de Salud (SMS), según el dato facilitado por Pedreño.

Un portavoz de Salud matizó, este lunes por la tarde, que no hay una rechazo a la medida como tal, aunque este departamento insiste en que debe abordarse primero el déficit de médicos, mientras que la posible reducción de las horas de guardia debe "evaluarse" y "consensuarse" entre las comunidades.

El propio Ministerio de Sanidad es consciente de las dificultades que hay para modificar el actual modelo de guardias, y por ello lo que plantea es un cambio gradual. Se trataría de «dar cierta flexibilidad» para que este «cambio estructural» se vaya aplicando «poco a poco en cada uno de los servicios y cada uno de los lugares donde se puede implantar». El primer paso sería aprobar los «cambios normativos necesarios», mediante la modificación en 2024 del Estatuto Marco. «Es una medida que es compleja y que requiere una reestructuración de nuestro Sistema Nacional de Salud (SNS)», explicó la ministra, Mónica García, la semana pasada. La reforma no conllevaría una pérdida retributiva para los médicos, aclaró.

Pero el cambio es, para García, imprescindible, porque un profesional que hace una guardia un fin de semana está trabajando «60 horas a la semana», y «esto no ocurre en ninguna otra profesión en la que se trabaje legalmente«. Para el Ministerio, esto es una »aberración« que difícilmente es compatible con la legislación europea. La propia profesión lleva tiempo advirtiendo de ello. Organizaciones médicas como la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (Semes) son firmes partidarias de abordar este debate. Pero, al mismo tiempo, todos admiten las dificultades que entraña el cambio con el actual déficit de médicos.

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