El vicealcalde de Murcia se ausenta de las tres últimas juntas de gobierno

Tres viernes, los últimos desde el pasado 17 de febrero, lleva el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Murcia, el portavoz de Ciudadanos, Mario Gómez, sin acudir a las Juntas de Gobierno que celebra cada semana el máximo órgano del ejecutivo municipal. Una situación que no ha sentado demasiado bien a sus socios socialistas, pero que el vicealcalde justifica por «cuestiones médicas y personales ineludibles».

El primero viernes fue consecuencia directa de que el alcalde, José Antonio Serrano, le quitara las competencias para sacar adelante un nuevo procedimiento para el contrato de las sillas y tribunas para los desfiles de Semana Santa y Fiestas de Primavera, estando aún abierto otro. Gómez ya advirtió que estaba en contra y que incluso creía que este nuevo proceso «era irregular». Él no fue, con lo cual evitó votar en contra, mientras que sus otros tres compañeros de partido dieron el visto bueno al acuerdo de la Junta.

El viernes siguiente, 24 de febrero, fue «una revisión médica aplazada por coincidir con el Pleno» (que se celebró el día de antes), lo que impidió a Gómez estar presente en la reunión, explicó el propio vicealcalde; y fueron «asuntos personales» los que le llevaron a no estar presente en la de la semana pasada, 3 de marzo. «No hay ninguna segunda lectura que hacer a este asunto», insistió Gómez. Su presencia en la Junta de este viernes, 10 de marzo, está asegurada «porque no tengo mayor problema». Salvo que lleven a aprobación el nuevo contrato de las sillas.

Con un escueto «cada concejal es responsable de asistir a las juntas y de cumplir con su obligación y la de su partido» zanjan desde el PSOE el asunto de estas ausencias. En otros ámbitos municipales lo consideran un «total desinterés» del vicealcalde por la recta final de un mandato que también va a ser el último para él, ya que ha anunciado que deja la política.

Lo cierto es que la gobernabilidad del Ayuntamiento murciano en estos dos últimos meses previos a las elecciones municipales del 28M no están siendo un camino de rosas para el equipo de gobierno. La dimisión del portavoz de Podemos, Ginés Ruiz Maciá, deja el tablero de votos en el Pleno municipal en tablas, y solo con el voto de calidad del alcalde, José Antonio Serrano, saldrán las últimas propuestas de los socios. Eso si ningún concejal del PSOE, Cs o Podemos (la única que queda del grupo municipal, la edil Clara Martínez Baeza) falla.

Y son varias las nuevas ordenanzas municipales presentadas y en procesos previos de información pública, las que dependen de este fino equilibrio, al menos para su aprobación inicial, como las de la Ocupación de Vía Pública con Terrazas y Otras Instalaciones; la de Publicidad Exterior, la de Mercadillos Semanales e incluso de la ORA (ahora Servicio de Estacionamiento Regulado-SER).

Bien es cierto que en el caso de la nueva normativa para la ORA, todo apunta a que el PSOE al final optará por no presentarla. Parece que no hay acuerdo ni siquiera en el seno del ejecutivo municipal y que desde Ciudadanos se votaría en contra por incluir la ampliación de las zonas reguladas y por subir las tarifas. Sería un varapalo gratuito, sin recompensa en las urnas.

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