El programa de intercambios juveniles ofrece este verano estancias en siete países de Europa

En sus veinticinco años de historia, el programa de Proyectos Europeos e Intercambios Juveniles ha dado la oportunidad a más de 7.000 personas de conocer otros países y de compartir experiencias e inquietudes. Ahora arranca una nueva edición, y los interesados pueden elegir entre trece opciones de diferentes temáticas que se desarrollarán en Croacia, Estonia, Luxemburgo, Bélgica, Rumanía, Alemania y Reino Unido. La inscripción para las 85 plazas previstas se puede realizar a través de la web de Informajoven y los aspirantes tienen de plazo hasta el próximo jueves. La iniciativa pretende fomentar la ciudadanía europea y proporcionar un aprendizaje intercultural.

Alfonso Alcolea vivió la experiencia de este programa en 1997. Ahora, a sus 48 años, recuerda su viaje a Berlín como «la oportunidad que me sirvió para tener una visión integral del horizonte europeo y de conocer cómo se trabaja en otras ciudades». Asegura que marcó un antes y un después en su vida. Y tanto le cambió el chip aquella salida que hizo cuando era un chaval de 22 años que ahora trabaja en el corazón de Europa como funcionario de la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea.

Ana García también guarda muy buenos recuerdos de su viaje a Túnez en 2003, ya que en este programa de intercambios la Comisión Europea también financia salidas a destinos que están fuera del territorio comunitario a modo de cooperación internacional. «Fue una experiencia maravillosa y un choque cultural muy fuerte. Estuvimos con gente de Finlandia, Argelia y Túnez, el país de acogida». Esta periodista de 44 años, que conserva aún amigos de entonces con los que mantiene relación, recuerda cómo yendo sola no tuvo más remedio que perder la vergüenza y hablar en inglés. «Te abre la mente a la hora de relacionarte, ya que te mezclan con grupos de distintas nacionalidades».

Además de vivir la experiencia cuando tenía 25 años, Ana fue después monitora en distintas salidas de la iniciativa europea. Un cambio de papeles que le llevó a conocer Bélgica e Italia. «Disfruté mucho al otro lado, viendo cómo se lo pasan los jóvenes».

Germán Teruel también se convirtió en monitor después de participar hasta en cuatro ocasiones en el programa. «Con 16 años fui a Finlandia, donde repetí más tarde. También estuve en Bélgica e Italia siendo estudiante, y como monitor conocí Austria y Portugal». Según Teruel, profesor de Derecho Constitucional en la Universidad de Murcia (UMU), estos intercambios le convirtieron en europeísta. «Lo recuerdo como una experiencia extraordinaria con un entorno multicultural que me hizo entender el lema 'unidos en la diversidad'», destaca.

Nicolás Van Iseghem coincide con el resto de entrevistados en lo emocionante de la aventura. «Estuve en Alemania con 13 años. Era la primera vez que viajaba sin mis padres y pasé una semana que nunca olvidaré». Tanto le gustó que este año volverá a presentar su solicitud para viajar a Croacia. En el lado contrario está Alejandra Armenta. Ella no salió de Murcia, sino que la descubrió gracias a esta iniciativa pensada para los más jóvenes. Llegó en 2009, con 22 años, desde Ciudad de México y encontró en la Región un lugar donde desarrollarse profesional y personalmente. «Era la primera vez que viajaba a España y me encantó». Alejandra es un ejemplo de lo que puede cambiar la vida de una persona tras vivir una experiencia internacional. «En estos trece años Murcia se ha convertido en mi hogar».

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