Secciones
Servicios
Destacamos
Si no hay posibilidad de encontrar cobijo varios metros sobre el suelo, habrá que hacerlo a pie de calle. Bajo esta premisa están comenzando a proliferar viviendas en espacios que los barrios de la ciudad de Murcia han reservado tradicionalmente al comercio o al ... reguardo de vehículos. Sin embargo, la crisis que atraviesa ya desde hace tiempo la venta al por menor, sumada a la fuerte demanda de alojamiento –dada la escasez de vivienda en el mercado–, ha lanzado a muchos propietarios a reconvertir en 'lofts' bajos de diverso tamaño y condición.
Si bien es difícil discriminar a través de los registros municipales cuántos apartamentos se encuentran ubicados en inmuebles de este tipo, los datos de más fácil acceso apuntan a que el interés por esta opción cada vez va a más. De hecho, el año pasado se solicitaron a la Concejalía de Planificación Urbanística, Medio Ambiente y Huerta del Ayuntamiento de Murcia 32 informes de viabilidad urbanística para este tipo de proyectos, prácticamente los mismos registrados en los primeros cuatro meses de 2024.
«Estos documentos únicamente despejan las dudas de aquellos que quieren lanzarse a una empresa de este tipo», explica el concejal del ramo, Antonio Navarro Corchón. De hecho, el edil recuerda que para los titulares que sepan con certeza que no cuentan con condicionantes urbanísticos o en el estatuto de la comunidad de propietarios «basta con una declaración responsable y la correspondiente licencia de obras para acometer la transformación». Ya después podrán solicitar la cédula de habitabilidad, que en principio es necesaria para evitar problemas con la Administración y que, desde luego, es indispensable si se quiere dedicar el espacio a alquiler turístico, por ejemplo.
Las limitaciones de planeamiento pueden pasar porque el local no se encuentre en suelo urbano o porque el cupo de viviendas por hectárea haya sido superada, siempre que el inmueble no tenga ya 'per se' un uso de naturaleza mixta. «Otro impedimento de aplicación reciente es su ubicación en zona inundable», explica Jerónimo Jover, portavoz del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Murcia.
Jover cree que en un momento «en el que los locales comerciales ubicados fuera de las zonas 'prime' caen como moscas, esta es una muy buena opción, tanto para aumentar la escasa oferta como para evitar que ciertas áreas de la ciudad queden desangeladas». Y todo ello, pese a la «incertidumbre» que en su opinión genera la futura regulación del «alquiler de temporada», fórmula utilizada, por ejemplo, por los estudiantes o ciertos trabajadores.
Advierte, además, que ejecutar de manera adecuada esta conversión, para que el espacio sea habitable, puede exigir una inversión de al menos 40.000 euros por unos 80 metros cuadrados. «Hay que revisar cuestiones como las salidas de humos, la ventilación cruzada, si se cuenta con la iluminación adecuada y cumplir con la orden de condiciones higiénicas de 1944», expone. Reconoce, no obstante, que «no es difícil encontrarse con auténticos zulos que no cumplen con los requisitos mínimos de una vivienda», y que únicamente buscan sacar, aunque sea de manera ilegal, la máxima rentabilidad posible al bajo mediante su arrendamiento, que es el principal mercado al que parecen dirigirse estas conversiones.
Esta circunstancia lleva también a los propietarios a segregar un mismo local en varias viviendas, algo que puede apreciarse en barrios como El Carmen o Santa María de Gracia o Vistalegre, plagados ya de este tipo de oferta. «Llevo aquí unos meses y llegué a través un amigo, pero no tengo contrato», comentaba esta semana un inmigrante latinoamericano, a preguntas de LA VERDAD, desde la puerta del pequeño apartamento que habita en este último barrio.
«Al final, en un contexto en el que los pisos de alquiler duran libres apenas unas horas, vivir en este tipo de inmuebles no es más barato que hacerlo en un primero; de hecho, en muchos casos se trata de apartamentos con cocinas y baños a estrenar, ya que acaban de sufrir una reforma, por lo que el mercado manda», expone Jover. Guy García paga 500 euros mensuales por un pequeño estudio del barrio del Carmen que ocupaba, según comenta, una parte de lo que fue un antiguo horno de pan.
Guy, francés de padres españoles, es prácticamente un nómada digital, ya que trabaja desde aquí como ilustrador para clientes galos. «Mi familia tenía una casa en Torrevieja y, desde allí, decidí mudarme solo a Murcia porque me gusta el ambiente», explica el francés, señalando que la vivienda de apenas 45 metros cuadrados que ha habitado hasta ahora –con un salón cocina y un dormitorio– ha sido un buen punto de partida para ir conociendo la ciudad. Sin embargo, casi un año después de su llegada, ha decidido buscar algo mejor. «El lunes [hoy para el lector] ya me habré mudado a otra vivienda de Vistalegre», comenta, reconociendo que estos alojamientos reconvertidos presentan una gran rotación de inquilinos.
Como una oportunidad de negocio ha visto esta tipología de viviendas Vicente López Plaza. Este murciano ha fundado, junto a otros dos socios, la plataforma de inversiones inmobiliarias colaborativas Invexspot. «Llevamos ya un piso de alquiler y otro en venta en El Carmen y tres plazas de garaje», explica señalando que cualquier inversor puede contribuir desde 300 euros a los proyectos que le parezcan más atractivos. Ahora han puesto sus ojos sobre un bajo en la calle Melilla, junto al polígono de La Fama, donde hasta hace poco funcionaba un negocio de alimentación regentado por ciudadanos chinos.
De hecho, el local ya luce una lona de esta plataforma, ofreciendo la propuesta a posibles compradores y animándoles a participar en el futuro diseño del espacio, que arrancará en un mes. «La verdad es que es un bajo muy particular, ya que cuenta con tres accesos, lo que le da bastante luminosidad y nos permitirá cerrar la entrada directa desde la calle, limitando el acceso al patio interior del conjunto de edificios», explica. La propuesta pasa por crear dos habitaciones en un 'loft' de unos 60 metros cuadrados. Precio: desde 105.000 euros. Antes, un mostrador; ahora, una cama.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.