Una plataforma vecinal reivindica un nuevo centro cultural para Espinardo

Los integrantes de la organización, que apenas ha cumplido una semana de vida, están cansados de la «inoperancia» del Ayuntamiento, por lo que además de unirse para contar lo antes posible con otro local en el que poder desarrollar las actividades de los distintos colectivos que la forman, «y otros que lo necesiten», han decidido elevar una propuesta de nueva ubicación.

Su presidente, Paco Franco, explicó que «hay unanimidad» en el rechazo a la última localización planteada por el Ayuntamiento: un solar municipal junto a la piscina de Espinardo, que, en un principio, la Consejería iba a utilizar para ampliar el centro de salud, lo que, al parecer, la Administración regional ya ha descartado. Tiene unos 1.500 metros cuadrados.

El terreno que la plataforma propone, que aseguran «es público», tiene 3.055 metros cuadrados y está en la zona conocida como Las barracas, en concreto en la calle San Pedro, a unos 200 o 300 metros como máximo del eje neurálgico del barrio. «Consideramos que es suficiente para albergar todos los servicios que necesita el barrio y que se merecen los vecinos, con un salón de actos capaz de albergar a doscientas personas, y en planta baja para dotarle de accesibilidad universal», apuntó Franco, lo que, en opinión de esta nueva organización, no cumple el otro solar.

«Lo que propone la Junta y el Ayuntamiento vuelve a estar junto a Juan Carlos I, la biblioteca, el centro de salud, es decir, que se vuelven a centralizar en la misma área todos los servicios», además de ser un espacio «claramente insuficiente; necesitamos un lugar con proyección hacia el futuro, más ambicioso y relacionado con los nuevos desarrollos urbanísticos».

El presidente de la plataforma, que indicó que tienen previsto solicitar una entrevista con el alcalde, José Ballesta, para darse a conocer, dejó claro que por mucho que ofrezcan construir un nuevo centro, «si no hay consignación presupuestaria, no hay nada, y en las cuentas de 2025 no la hay».

Franco concluyó que habían calculado que desde que Espinardo no tiene centro cultural el Ayuntamiento ha dejado de invertir en el barrio alrededor de un millón de euros para actividades. Detrás de la plataforma, que lleva un año gestándose y que sigue abierta a adhesiones, al decir de su presidente, están la asociación vecinal Joven Futura, el centro de la mujer y el de mayores; la directiva del IES José Planes y del colegio La Milagrosa; la asociación Teatro Recreative, la asociación de vecinos Por Espinard, el grupo scout, la Coordinadora de Barrios, el AMPA del centro educativo Pedro Pérez Abadía, San José, La Consolación y La Milagrosa, la Asociación Educa (escuela infantil), el grupo de senderismo Estrella Levante, la coral polifónica Exilum, la tertulia literaria Recreative, la comunidad cristiana de base del Espíritu Santo, la peña huertana La Tarabilla y la asociación de viudas La Milagrosa.

La plataforma, apuntó Franco, «se disolverá cuando tengamos el compromiso firme de que se va a construir el centro cultural; por ahora, no tenemos nada».

El concejal de Cultura e Identidad, Diego Avilés, manifestó que el Ayuntamiento tiene clara esta necesidad y que está trabajando en ello: «Está en vías de solución». Señaló que Urbamusa había elaborado ya una memoria valorada sobre la construcción de un inmueble junto a la piscina, si bien no especificó lo que costaría.

Esta memoria apuesta por una edificación por módulos independientes, conectados entre sí por pasarelas o pasillos abiertos o cerrados, según los casos, que permitan ubicar las distintas edificaciones que conformen el centro entre los árboles existentes en la parcela. «La intención es redactar cuanto antes el proyecto, pues aunque es costoso y no es fácil de ejecutar, es muy necesario», indicó Avilés. El concejal añadió que «no tengo inconveniente en reunirme con la plataforma, junto a la presidenta de la Junta Municipal, y escuchar sus demandas».

«El Ayuntamiento no es el propietario de la totalidad de los terrenos que componen la parcela de equipamiento y viario previstos en el planeamiento». Esta frase sintetiza la postura del equipo de gobierno del PP y de la Junta Municipal de Espinardo, respecto a la posible utilización del espacio propuesto por la nueva plataforma ciudadana.

La pedánea, Encarna Guillén, subrayó que así consta en el informe redactado por el Servicio de Patrimonio el pasado febrero. «Solo son públicas cuatro partes y, además, no están juntas. Una tiene 614 metros cuadrados, otra 100, la tercera 400 y la última 138 metros», comentó. Además, dijo, está en un plan parcial sin desarrollar, por lo que «no podemos pedir la cesión anticipada de los terrenos». Para la alcaldesa de barrio, «lo que pide la plataforma es un brindis al sol; con esta división de opiniones lo único que conseguimos es no avanzar en lo que necesitamos como el comer».