Una nueva promoción en Baños y Mendigo apuntala la vuelta del turismo de los resorts a Murcia

La intención de esta es así, según fuentes conocedoras de la propuesta, la de edificar por fases en una gran parcela de unos 20.000 metros cuadrados. Este desarrollo arrancaría con la construcción de seis villas y 38 apartamentos, para proseguir después con el resto de inmuebles, completando una oferta con diferentes tipologías de viviendas. «Este proyecto se ubicará en un entorno residencial ya consolidado de alto nivel, dada la calidad de las construcciones de la zona», comenta, a preguntas de LA VERDAD, el concejal de Planificación Urbanística, Huerta y Medio Ambiente, Antonio Navarro.

No deja de resultar llamativa esa reactivación del interés de los promotores inmobiliarios por el turismo residencial, un nicho de mercado que fue demonizado tras la llamada 'crisis del ladrillo', posiblemente por un desarrollo sobredimensionado para el momento económico y los recursos disponibles, y que parece que vuelve a coger algo de vuelo tras varios lustros sin apenas movimiento.

De hecho, fue después de la pandemia cuando pareció retomarse la apuesta por este tipo de oferta. En torno al centenar de licencias se han concedido en este último lustro en la urbanización Altaona, conocida anteriormente como Mosa Trajectum, y que se localiza a apenas un par de kilómetros de El Valle, según apunta el edil. Además, hace menos de un año que el Consistorio anunciaba el interés por reactivar el complejo turístico-residencial Sierra Golf, en la conocida como finca Escobar de la pedanía de Jerónimo y Avileses.

En este caso, la también empresa alicantina Moorstyle España, conocida comercialmente como Urmosa, anunció su intención de terminar la urbanización de las 92 parcelas pendientes por fases de este resort, que incluye hasta 3.000 viviendas, así como un hotel y otros equipamientos, tal y como se recoge en el plan parcial.

En la primera fase la compañía ya tenía licencia para levantar 311 viviendas y culminar los trabajos de los servicios urbanísticos, como las redes de telefonía y luz, y el enganche a las de abastecimiento y saneamiento, aún por terminar, algo que no ocurre en el caso de El Valle, ya urbanizada. No obstante, en su web y a día de hoy apenas aparece información del nuevo proyecto en Sierra Golf, al que únicamente se hace referencia con el término 'próximamente'.

Considera Navarro Corchón que propuestas como estas son un ejemplo más del dinamismo urbanístico y económico del municipio, con un desarrollo «equilibrado». De hecho, el pasado viernes anunciaba el concejal la tramitación de tres planes parciales en pedanías de distintos puntos cardinales del municipio para el desarrollo de primera vivienda. Ahora se abre un nuevo camino, o más bien se profundiza en él, con la vuelta al turismo residencial.

«Es una actuación importante en una zona como la del Campo de Murcia, que crece y coge cada vez más peso, lo que incentiva la inversión», comenta el edil, convencido de que la cercanía a la autovía, los vuelos regulares al Aeropuerto Internacional de la Región y el desarrollo del Parque Logístico del Sureste, con Amazon a la cabeza, tiran de este tipo de oferta. «El resort de Corvera también se ha reactivado gracias al movimiento empresarial», remarca Navarro, recordando el éxito que tienen estos desarrollos entre los ciudadanos británicos y de Países Bajos.

Todas estas inversiones han pesado, a buen seguro, en la decisión del Ayuntamiento de Murcia de tumbar el proyecto para la construcción de la primera planta de biogás y biofertilizantes del municipio de Murcia, localizada precisamente en Baños y Mendigo. Así, el Consistorio emitió el mes pasado un informe desfavorable durante el proceso de información pública del proyecto y de la solicitud de autorización ambiental integrada.

Alega en la negativa que las instalaciones no cumplen con el requisito que recoge el Plan General de Ordenación de tener una distancia mínima de 2.000 metros sobre los núcleos de población cercanos. De hecho, los técnicos argumentan que la planta sería 'vecina' de una nueva urbanización aprobada, parcela con parcela, denominada La Loma. «Evidentemente, esta planta supondría un desincentivo al desarrollo de la zona», reconoce Navarro Corchón.