El montaje del Belén de Salzillo se abre al público

«No estaba previsto que las visitas arrancarán hasta hoy, pero no pudimos decirle que no a todos ellos que quisieron acercarse hasta aquí con motivo del estreno oficial; eran las 10 de la noche y seguía entrando gente», comentaba una de las responsables del montaje, al tiempo que confesaba que apenas había dormido en 15 días. «Había nervios porque todo saliera bien y lo hemos conseguido», respiraba aliviada.

Fueron ayer los trabajadores de la casa –es decir, los funcionarios municipales– los primeros en acercarse para admirar la obra del maestro imaginero. «El nivel de detalle de ese árbol es increíble; los belenistas encargados de la escenografía se lo han currado», destacaba Álvaro, mientras contemplaba las tres escenas montadas: la Anunciación, el Nacimiento y el Cortejo de los Reyes Magos.

«Hemos introducido un par de figuras que no forman parte de ellas, pero las hacen aún más interesantes; el ciego y su Lazarillo», comentaba el concejal de Cultura e Identidad, Diego Avilés. «Yo ya lo había visto en el Museo Salzillo, pero con esta ambientación merece aún más la pena», comentaba Paco, mientras Cinthia y María José explicaban a sus boquiabiertos hijos la escena de llegada de sus Majestades de Oriente, acompañados por pajes goyescos.

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Ya por la tarde, la coral Discantus amenizó la visita. Poco antes, Papá Noel había llegado a la plaza Belluga y estrenado su casa de la calle Basabé, acompañado de un gran espectáculo.