El Mercado de Correos abre sus puertas en Murcia con 15 paradas gastronómicas

El emblemático edificio de Correos ha reabierto sus puertas este martes, tras 38 años cerrado, para acoger el mercado gastronómico promovido por Lonja de Murcia y Grupo Orenes, que cuenta con quince puestos que serán dieciséis cuando abra la terraza, dentro de un mes. La rehabilitación del inmueble, en la que se han invertido cinco millones de euros, ha conservado la fachada original e incluso el suelo que pisaron miles de Murcianos desde los años 30, cuando se construyó, hasta 1980, cuando cerró.

Los puestos que ofrece nuevos espacio gastronómico son 'La Estafeta', con recetas de repostería francesa; 'La cocina de la abuela', especializada en empanadas caseras, tortilla de patatas y croquetas; 'La del pulpo', con este producto como gran protagonista; 'La bomba', una arrocería; 'Abrásame mucho', con brasas de carbón para pescado y carne, que ofrecerá también marisco; 'Moshi moshi', de cocina japonesa; 'La central de Correos', centrado en bebidas; 'El timbre', cuyo plato estrella es el jamón ibérico de bellota; 'El disparate', con guisos y verduras; 'Ciao bella', un italiano; 'La buena correspondencia', de comida mexicana-peruana; 'El sello', un rincón para los salazones y ahumados; 'La internacional', una barra de cervezas de la mano de Mahou; 'El tintero', una vinoteca con más de 65 referencias, especialmente vinos de la tierra; 'La coctelería' y 'La vermutería'. La parte superior del edificio se reserva para eventos culturales.

El Mercado de Correos estará abierto los 365 días del año. De lunes a jueves, el horario será de diez de la mañana a doce de la noche. Los fines de semana abrirá hasta las dos de la noche.

La inauguración ha contado con gran presencia de autoridades, entre ellos el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, el alcalde de Murcia, José Ballesta, la presidenta de la Asamblea Regional, Rosa Peñalver, y el delegado del Gobierno, Diego Conesa.

El Mercado de Correos, que aplica un modelo que ya se desarrolla con éxito en otras ciudades del país como Madrid, Barcelona o Sevilla, aúna sus quince paradas gastronómicas con distintas y exclusivas actividades. Para ello, cuenta con la participación de comerciantes, hosteleros, marcas y productos referencia del sector tanto de ámbito local como nacional.

Una vez en marcha, se prevé la creación de un centenar de puestos de trabajo directos, además de otros 150 vinculados a su actividad. Se estima una afluencia prevista de más de 400.000 visitantes anuales, lo que lo convertirá en uno de los lugares con mayor afluencia de la ciudad. Con estas cifras, se generará un impacto económico de entre cinco y ocho millones de euros, según aseguran sus promotores.