Gallos y gallinas, ayer, junto a la avenida Almirante Loaysa. Ros Caval/ AGM

Un corral de gallos impide el descanso a vecinos del barrio murciano de Santiago y Zaraíche

Denuncian al Ayuntamiento que el mal estado del recinto permite a las aves salirse, deambular y cruzar la avenida Almirante Loaysa

Viernes, 15 de diciembre 2023, 01:13

Despertarse cada día a las 4 de la madrugada con el canto de los gallos se ha convertido en un suplicio para los vecinos de los edificios de la calle Morunos que dan al corral de un solar colindante con la avenida Almirante Loaysa, en ... el barrio de Santiago y Zaraíche. Tanto es así que desde la comunidad de vecinos del edificio Nelson llevan desde finales de septiembre pidiendo al Ayuntamiento de Murcia que tome cartas en el asunto.

Publicidad

«Desde finales de verano, un grupo de gallos y gallinas vive en los solares ubicados detrás de la calle, perturbando la tranquilidad de los vecinos; hemos realizado múltiples denuncias ante diferentes entidades, incluyendo la Policía Local, el Seprona, Plagas de Murcia y Zoonosis, servicio municipal que se supone debe resolver estas situaciones; también nos hemos reunido con el pedáneo y con la concejala de Salud, pero, hasta la fecha, ninguna acción concreta se ha tomado para atajar el problema de raíz», explican desde la Comunidad de Vecinos del Nelson.

En este tiempo, apuntan, las aves se han reproducido «y campan a sus anchas» por los alrededores, llegando a cruzar a las colindantes avenidas de Santiago y Almirante Loaysa, «con lo que supone de peligro para la seguridad vial». Los vecinos también denuncian el mal estado del solar, «que no está vallado y que se está convirtiendo en un vertedero de enseres».

Para los vecinos, «la solución a este problema es clara y sencilla: la limpieza y vallado de los solares en cuestión» y exigen al Ayuntamiento «que cumpla con su responsabilidad de mantener la armonía y la salubridad en nuestra comunidad».

Publicidad

Las aves proceden de una vivienda próxima a los edificios, en cuyo huerto trasero hay un corral cercado, pero cuya valla es insuficiente para contener a gallos y gallinas.

Desde la Concejalía de Salud explicaron que esta es una zona de huerta que el desarrollo urbano va ocupando y en la cual aún es posible encontrar viviendas que cuentan con corrales domésticos. «Son zonas donde existían casas aisladas y caminos y, en relativamente poco tiempo, hay edificios y carreteras».

Añadieron que ante las peticiones vecinales los Servicios de Salud han emprendido una doble vía para solucionar el problema. Por una parte, las Brigadas de Zoonosis han realizado inspecciones veterinarias para intentar capturar a las aves y devolverlas a su lugar de origen. En paralelo, se ha abierto un expediente administrativo, localizando al propietario del corral e instándole a que refuerce el vallado, para que no salgan las aves, así como la limpieza, desratización y desinsectación del lugar.

Publicidad

«Actualmente, está dentro del plazo legalmente establecido para el trámite de audiencia. Si no hace nada, el procedimiento continuará, pudiendo dar lugar a la imposición de multas», concluyeron.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Infórmate con LA VERDAD: 1 año x 29,95€

Publicidad