Juan Carlos I 'crecerá' con 250 casas, bajos comerciales y una gasolinera

Después de años de parón, la actividad inmobiliaria regresa a la avenida Juan Carlos I, una de las dos arterias principales del ensanche norte de la capital. Los trabajos de urbanización avanzan en una de las últimas parcelas todavía libres de ladrillos, ubicada entre Senda de Granada y la avenida Reino de Murcia. El proyecto prevé 250 viviendas (entre pisos, áticos y dúplex adosados), además de bajos comerciales, zonas verdes, un área de equipamientos y una gasolinera.

El proyecto forma parte del plan de reforma interior (Peri) de Santiago y Zaraíche (UM-114) y sus orígenes hay que buscarlos hace casi una década. La crisis desinfló la inversión y los terrenos quedaron a merced de la maleza y el abandono. Ahora, las brigadas de operarios han explanado el terreno y el movimiento de las obras deja ver las zanjas de algunas infraestructuras. Estos primeros trabajos, que han obligado a cortar al tráfico un tramo de Senda de Granada, están siendo ejecutados por la urbanizadora municipal Urbamusa (cuyos accionistas son el Ayuntamiento y la Comunidad Autónoma), y el proyecto de construcción corre a cargo de Urdecon.

Dicha unidad de actuación prevé la construcción de nueve bloques: tres de ocho plantas (con fachada a Juan Carlos I) y los otros seis de cuatro alturas, que se ubicarán en segunda y tercera fila, además de catorce adosados. Dos de los edificios tendrán bajos comerciales con una superficie de poco más de mil metros cuadrados. La unidad de actuación incluye también una estación de servicio, que ocupará 2.500 metros cuadrados en la esquina con Reino de Murcia, y otros 2.700 m2 de equipamientos de carácter local, según aparece en los planos de reparcelación.

«Cierto repunte»

¿Es el proyecto de Urdecon un síntoma de que el sector coge vigor tras años de estar con respiración asistida? La Concejalía de Urbanismo aprecia un «cierto repunte» en la concesión de licencias de edificación en el primer semestre del año respecto a 2015. Eso sí, el incremento más significativo se ha detectado en las obras de rehabilitación sobre las de nueva planta, «una tendencia que se viene acentuando desde el inicio de la crisis inmobiliaria», señalan desde el Ayuntamiento.

Entre los datos positivos destacan los expedientes referidos a obras de reforma. En los seis primeros meses se han autorizado 519 proyectos, frente a los 460 de todo el año pasado. En cuanto a actuaciones de obra menor, el primer semestre se cerró con 1.271 expedientes, frente a los 2.790 de todo el año pasado. El tercer apartado de la estadística que baraja Urbanismo hace referencia a las licencias de obras. En 2015 se autorizaron 399 expedientes, entre los que figuraban 172 viviendas. Mientras, hasta el pasado mes de junio la cifra fue de 241 expedientes, con 110 viviendas. No obstante, el Ayuntamiento precisa que sus técnicos están tramitando la construcción de 72 viviendas más de nueva planta, que podrían recibir la licencia en breve, por lo que ya se alcanzaría la misma cifra que en el ejercicio anterior.

Desde Urbanismo recuerdan que las nuevas tramitaciones para la obtención de autorización de obras han sustituido a la solicitud de licencia en los casos previstos en la ley regional. Así, las obras de rehabilitación y las denominadas menores se gestionan mediante el procedimiento de declaración responsable y comunicación previa, respectivamente. Se trata de un papeleo más ágil, ya que la autorización municipal para cualquier reforma o restauración interior de viviendas o locales se obtiene con la mera presentación y aceptación de la solicitud. En esta estadística no aparecen las licencias de actividad, que tienen una tramitación distinta y que se refieren a bajos comerciales y a otro tipo de negocios.