Murcia y Molina retoman el plan de la 'superlínea' 87

Los municipios de Murcia y Molina de Segura tienen intereses comunes en el transporte público, ya que las líneas de bus que los comunican atraviesan o tienen paradas en el centro de Murcia. El Gobierno municipal quiere ir un paso más allá y va a sopesar conceder autorización para un proyecto que viene de lejos, que permitiría fusionar varias líneas que conectan ambos municipios y poner en servicio la 'superlínea' 87, que enlazaría Molina de Segura con el complejo sanitario de La Arrixaca pasando por el centro de Murcia. El concejal de Fomento de Murcia, Roque Ortiz, y el alcalde de Molina, Eduardo Contreras, mantuvieron ayer una reunión para abordar este proyecto, al que se opuso el anterior equipo de gobierno esgrimiendo que ya circulaban bastantes autobuses por Murcia y que la tendencia debía ser reducir el paso de los vehículos de Latbus porque eran competencia de los 'coloraos'.

«Existe un importante flujo de viajeros entre Molina, Murcia y El Palmar por lo que tenemos que trabajar en dar el mejor servicio posible al ciudadano. Ahora vamos a estudiar esta propuesta y las posibles repercusiones que pueda tener en nuestra ciudad para mejorar el servicio de transporte público», subrayó Ortiz, quien recordó que la propuesta ya se ha presentado en la Comunidad Autónoma y ahora el Ayuntamiento tiene que elaborar un informe de viabilidad.

Sin transbordos

Eduardo Contreras indicó que el objetivo es «la reordenación del transporte desde Molina de Segura pasando por Murcia y llegando a El Palmar, unificando las líneas existentes y manteniendo la viabilidad económica». En concreto, se unificarían la 22 (Molina de Segura), la 26 (El Palmar) y la 39 (Campus de Espinardo). La 'superlínea' 87 unirá pedanías y centros urbanos, según Latbus, y permitirá a los usuarios hacer recorridos más largos sin necesidad de transbordos. También mejoraría los horarios, ya que habría autobuses desde Molina y La Arrixaca cada 15 minutos en las franjas de mayor uso.