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Manuel Madrid
Sábado, 6 de diciembre 2014, 00:45
El Palacio de los Deportes ofrece este fin de semana una imagen inusual. Nada de pelotas ni porterías ni canastas. La pista central, escenario donde ElPozo ha escrito páginas de oro de su historia, está tomada por un millar de 'laneros', como se conoce a los participantes en la XIII Murcia Lan Party, un encuentro de aficionados al ordenador que dura 5 días en los que el tiempo pasa tan rápido que algunos hasta se olvidan de ir a dormir.
En este particular universo nada es chirriante. Ni siquiera que José Gómez, un chaval de 18 años de Mazarrón, se pasee en bata y unas llamativas 'pantuflas' con forma de perro. «Voy cómodo y no me las quito», se empeña. No es el único que anda por la Lan Party como si estuviera en su casa. Aquí el pijama es la ropa de 'trabajo' y la vida estos días no tiene otro horizonte más que la pantalla del computador. Lo tienen todo a mano. Para empezar, los amigos, pues la organización los distribuye según sus preferencias. En las mesas no falta de nada. La mayoría ha llegado con la nevera llena, y, salvo las necesidades básicas, en su puesto desayunan, comen y cenan.
Bebidas energéticas, leche, Coca-Cola, pan de sándwich, sacos gigantes de palomitas, bolsas de Cheetos, chocolatinas, Nestea, agua... Cuatro colegas de Almería colocaban a primera hora las banderas de su equipo: 'Linces Team', en las que figuraban sus 'nicks', los nombres con los que se relacionan con otros usuarios. Son 'Neervisiollo', 'Cangrejo', 'Matchet' y 'Xesar'. Quero 'Cangrejo', historiador, ha traído a esta Lan Party un calentador de agua y té y café para aguantar los cinco días. Antonio 'Matchet', estudiante de Ingeniería Informática en la Universidad de Almería, es la tercera vez que acude a esta cita: «Es fantástica. Muy interesante, buen ambiente y, sobre todo, mucho Internet».
Sin problemas de conexión
El jueves llegaron a Murcia el 90% de participantes -1.024 de aforo-, entre ellos 16 extranjeros y dos murcianos residentes en Suecia y Ginebra. Marco Antonio Fernández, presidente de la Asociación Murcia Lan Party, recordó ayer que «la expectación en torno a estas jornadas es máxima, ya que en una semana se cubrieron las 1.000 inscripciones anunciadas en un primer momento». Posteriormente se pudo ampliar a 24 plazas, que se agotaron en 19 segundos. «Todo marcha sobre lo previsto, sin incidencias con las conexiones gracias a Telefónica, con todo el mundo en sus puestos, y con un ambiente muy agradable, que es algo que nuestros visitantes aprecian».
En efecto, el 'buen rollismo' de la Murcia Lan Party es uno de los factores que más animan a los 'laneros' para no faltar a esta acontecimiento, en el que colaboran las concejalías de Deportes y Cultura, que todos los años coincide con la Constitución y la Inmaculada. Luciel Campbell, ingeniero de hardware mitad gallego y mitad irlandés, trabaja para una compañía que fabrica controladores de ventilación y conoce todas las Lan Party de España, pero la de Murcia es su favorita: «He ido a más grandes y a más pequeñas, y ésta tiene un 'feeling' especial, te sientes bienvenido. Los voluntarios están super dispuestos a ayudarte». Luciel vive en Málaga y llevaba tres años sin venir; esta vez lo ha hecho acompañado por su novia, Aisha González, canaria residente en Huelva, fan del juego de estrategia Team Fortress 2 y del mundo 'anime' -animación de procedencia japonesa-, y está encantada de haber venido a Murcia: «Coincido en que este ambiente es sensacional».
Simulación militar
Muchos pasarán horas de fijación en la pantalla, aislados del mundo, con las manos agarradas a un ratón. Y en ese contexto se desata el instinto. En el sector que ocupa la peña 'Aurora Boreal' alguien eructa con una fuerza descomunal. Nadie se inmuta. Todos están en lo suyo. «¡Venga, venga. ¡Qué suerte, tío! Me saca ventaja porque me ha robado dos cargas!», dice un chiquillo encabritado.
Una patrulla de ocho amigos de Alcantarilla disfrazados con indumentaria militar y armas vigila la sala. Imanol Losada, exmilitar del Ejército del Aire y copropietario de la tienda Deadpool Airsoft, ha organizado un terreno de juego para que los participantes de la Lan Party puedan sentir la sensación de experimentar en persona los juegos que les entretienen en el ordenador. «Es la primera vez que venimos y lo que queremos es que descubran el 'airsoft', juego y deporte de estrategia basado en la simulación militar. Una manera de que se levanten de sus asientos y hagan algo de deporte...».
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