La oposición rechaza mantener sin actividad la sociedad Casco Antiguo

PP, MC y Cartagena Sí Se Puede (Podemos) han censurado al equipo de gobierno local, que gestiona el PSOE, que mantenga la incógnita sobre la disolución de la Sociedad Municipal Casco Antiguo. En noviembre del año pasado, los socialistas le pusieron fecha de caducidad para el 30 de junio, y al mismo tiempo la mantienen en una inacción que solo consigue generar déficit, hasta el punto de dejar obras a medio terminar en el barrio universitario y tener problemas para pagar las nóminas de los trabajadores. El portavoz de Ciudadanos, Manuel Padín, no acudió, al estar de viaje.

El voto en contra de los tres partidos de la oposición, en el consejo de administración celebrado anteayer, desbarata, por ahora, la estrategia de la alcaldesa, Ana Belén Castejón, de llevar a Pleno los presupuestos municipales de 2018. El concejal de Urbanismo, Francisco Aznar, admitió que es preceptivo contar con el visto bueno a las cuentas de Casco Antiguo. La propuesta socialista incluye una estimación de ingresos de 4.051.630 euros, con una previsión de ventas de inmuebles de 2,1 millones que Aznar, no fue capaz de justificar. Solo hay una propiedad adjudicada, por 300.000 euros.

El PP rechazó el balance provisional de 2017, que registra un resultado negativo de 95.000 euros y la previsión de ingresos y gastos de 2018, ante «la improvisación y la incapacidad» del equipo socialista para concretar el futuro de la empresa. «En estos tres meses, no ha hecho nada por garantizar su futuro, no ha buscado financiación regional, nacional ni europea, lo cual lleva a pensar que actúa de manera débil y cobarde, porque quiere liquidar la sociedad pero no se atreve a decirlo». A su juicio, lo hará «declarando pérdidas para este año», lo cual abocará al cierre.

MC -cuyo portavoz, José López, presidía la sociedad hasta su salida del ejecutivo de coalición hace casi tres meses- considera que el motivo de mantener Casco Antiguo es que la alcaldesa «no quiere descuadrar más su simulacro de presupuesto». Los cartageneristas recuerdan que la desaparición de la sociedad supondría transferir la deuda que arrastra, alrededor de diez millones de euros, al Ayuntamiento, e incluirla en las cuentas municipales.

«Plan de acción inexistente»

«La inexistencia de un plan de acción coherente revela que, tras dos años de poner palos en las ruedas e instar el fin de la sociedad, pretenden mantenerla con vida un año más solo para que les cuadre su pueril borrador de presupuesto», apuntó López. Y defendió que, con él al frente, «se demostró que la sociedad es viable».

En Cartagena Sí Se Puede defienden lo contrario y reprochan al PSOE que «pretenda seguir con el pelotazo urbanístico y la especulación dentro de una empresa pública que «sigue desangrando al Ayuntamiento». «Da marcha atrás y pretende seguir vendiendo parcelas e iniciando actuaciones ajenas a un proceso de liquidación», dijo su portavoz, Pilar Marcos.