La Manga del Mar Menor, a 18º

Los padrones municipales de Cartagena y San Javier no dan más de cinco mil habitantes a La Manga del Mar Menor, el principal destino turístico de la Costa Cálida, que en verano supera con creces las doscientas mil almas, según los empresarios de la zona. Aunque basta con pasar una mañana en la localidad, tomar un café en alguno de sus bares abiertos o comprar en cualquier comercio para comprobar que, cuando concluye la temporada alta turística, la población real supera esa cifra gracias a jubilados y profesionales liberales que, desde los confinamientos de la pandemia, pasan allí cada vez más tiempo entre semana.

La Manga mantiene el pulso en otoño gracias, también, a las temperaturas que hubo hasta este lunes, altas para esta época del año. Ni durante el último episodio de lluvias de hace dos semanas los termómetros bajaron de 18 grados centígrados durante las horas centrales del día. Este lunes, algunos vecinos y visitantes aún disfrutaban del tibio sol en las playas del Medierraneo y Mar Menor antes de la anunciada borrasca que llega hoy.

No obstante, residentes, comerciantes y empresarios reclaman a sus ayuntamientos y a la Comunidad más servicios, infraestructuras e inversiones que ayuden a romper la estacionalidad, así como a regenerar su vida económica y social. Que complementen otras iniciativas desarrolladas con cargo al presupuesto del programa La Manga 365. Y que los municipios, especialmente el de Cartagena, mantenga los servicios en playas, como los lavapiés y pasarelas, hasta bien entrado el toño. En la remodelada plaza del Zoco, tradicional centro neurálgico de la actividad hostelera y comercial de la parte cartagenera de La Manga, siguen abiertos algunos establecimientos animados por los residentes habituales y los turistas jubilados que llegan por grupos a los hoteles.