Hansa acumula cuatro años sin restaurar el monasterio de San Ginés de la Jara pese a una sentencia judicial

Los requerimientos de la Consejería de Cultura a la empresa propietaria de todo este complejo y promotora del residencial, Hansa Urbana, para que actué no han surtido hasta ahora efecto. Y el Ayuntamiento de Cartagena tampoco ha asumido las obras de manera subsidiaria, aunque los tribunales respaldaron el acuerdo que adoptó en 2012 para impulsar la recuperación de un conjunto declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 1992.

El último avance en el expediente administrativo ha sido la presentación, por parte de la firma alicantina Hansa Urbana, de un proyecto de intervención en las construcción auxiliares, para «dar una solución» a su estado de deterioro. Así lo aseguraron a LA VERDAD fuentes de la Consejería, y añadieron que si bien las edificaciones situadas en el perímetro del convento «tienen interés menor» desde el punto de vista patrimonial, «se encuentran dentro del BIC, por lo que también están protegidas».

En el departamento que dirige Esperanza Moreno recordaron que en el monasterio, que data del siglo IX, ya culminaron las obras de conservación «del claustro y buena parte del monasterio». También afirmaron que «a día de hoy la seguridad del mismo está asegurada».

A partir de ahí, «el proyecto presentado ahora por los titulares» está siendo evaluado por los técnicos de la Dirección General de Bienes Culturales, que emitirán un informe. Este guiará los siguientes pasos para acometer las obras de conservación, y todo ello dentro de la tarea de Cultura de «velar porque los propietarios de los BIC mantengan el patrimonio en condiciones de seguridad y de mantenimiento».

«En este caso, se requirió a los titulares para que llevasen a cabo una serie de arreglos. Y la empresa ha presentado una propuesta de intervención en el BIC, que es la que debe ser analizada para ver si se atiene a la normativa», concluyeron en Cultura.

En paralelo, MC ha presentado una moción para que el Pleno inste al Ayuntamiento a «dar cumplimiento al compromiso municipal» con la restauración del monasterio. Fuentes de este grupo político reclamaron que «lleve a cabo las obras, inmediatas y subsidiarias, en el monasterio, alejándolo de cualquier desencuentro urbanístico y de la prejudicialidad penal que pesa sobre instrumentos de ordenación territorial y planeamiento».

La concejal María Dolores Ruiz se basa en el acuerdo de la Junta de Gobierno Local de 27 de febrero de 2012, cuando el PP gobernaba en solitario, y en la sentencia 141/2016 de la Sala de lo Contencioso Administrativo del TSJ. Esta, afirmó la edil, faculta a la corporación local a asumir las obras y pasar la factura a Hansa.

«La sentencia dispone que, examinado el Programa de Actuación [de Novo Carthago], el compromiso de llevar a cabo la restauración no se encuentra vinculado, en modo alguno, a la aprobación del proyecto de urbanización». Y ello porque «el coste de su ejecución es asumido íntegramente por la mercantil Hansa Urbana SA» en un convenio urbanístico con el Ayuntamiento, donde no recogió «su distribución como gasto entre los propietarios de la reparcelación». Es más, «aunque no se estableciera plazo para llevarlo a cabo» en su día, «no puede vincularse» la restauración del monasterio al proyecto de reparcelación. «Al describir el compromiso, se hacía ver que el deterioro del Monasterio era evidente y se describíaque habían iniciado, con anterioridad, pasos para su cumplimiento» en al año 2005; no puede pretenderse ahora posponerlo, a un momento posterior, ya que seiría contra sus propios actos», argumentó también el tribunal.

En consecuencia, MC considera que el Ayuntamiento y la Comunidad no pueden «tener en el olvido» el monasterio. Y exige retomar la senda iniciada por este grupo hace ocho años, cuando su portavoz y luego alcalde, José López, «forzó el inicio de los trabajos de restauración del monasterio, que Ana Belén Castejón paró cuando accedió a la alcaldía» en 2017.

María Dolores Ruiz llamó, asimismo, la atención, además, sobre la necesidad de acabar con la «degradación» y aplicar la Ley para levantar con urgencia el muro exterior, que «sigue derribado en cinco tramos, a pesar de que según equipo de gobierno Hansa pidió la licencia urbanística para arreglarlo en febrero». Por último, la concejal de MC concluyó que «no solo es preciso poner a salvo las casas de labradores del siglo XIX y las garitas, sino que en el monasterio falta consolidar la iglesia y de la torre fuerte, seguramente el elemento más valioso del conjunto».

La pandemia del coronavirus ha obligado a cancelar la romería de San Ginés de la Jara. Pero la Hermandad de Romeros llevó ayer la imagen desde la iglesia del barrio de San Ginés al antiguo convento, a orillas del Mar Menor, en una carreta tirada por caballos. Ante los muros, una decenas de personas, incluido el hermano mayor el hermano mayor, Andrés García, realizaron un rogativa frente a la Covid -19 al santo, que fue nombrado patrón de Cartagena en el año 1655 por una epidemia de peste.

Ya hoy, con motivo de la festividad de San Ginés, en la ciudad el templo parroquial acoge una misa a las 19 horas.