Con 90 años y sin miedo a las caídas: el programa que le ha devuelto la movilidad a Nicolasa

312 personas mayores de 65 años de las tres áreas de salud metropolitanas de Murcia han participado hasta la fecha en el programa Otago, que nació en Nueva Zelanda y se ha extendido con éxito por numerosos países. La Consejería de Salud quiere implantarlo progresivamente en toda la Región de Murcia. Las caídas constituyen un problema de salud pública de primer orden. Tres de cada diez personas mayores de 65 años sufren una caída al año. Entre los mayores de 80, el porcentaje llega al 50%, advierte Emilia Salmerón, enfermera de El Carmen y una de las responsables de Otago en el área VII. Las consecuencias pueden ser catastróficas: un 30% de las caídas terminan en lesión y, en aproximadamente un 5% de los casos, ese daño es grave: o hay fractura, muchas veces de cadera, o un hematoma subdural (cuando la vena se rompe y se produce una acumulación de sangre en la superficie cerebral).

Estas cifras se traducen en que casi 10.000 mayores de 65 años del área VII (Murcia Este) sufren una caída a lo largo del año y, de ellos, unas 590 tienen que ingresar por lesiones graves. En toda la Región hay, por tanto, miles de fracturas y daños graves cada año por las caídas. Algunos de estos pacientes ya no consiguen remontar y terminan falleciendo. En otros casos, la pérdida de calidad de vida es abrupta.

*Fuente: Unidad de Geriatría de la Arrixaca | Elaboración: Mar Saura

En 2022 murieron por caídas 52 personas mayores de 65 años en la Región de Murcia, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Pero esta cifra está lejos de reflejar la magnitud del problema, porque tras muchas otras muertes en las que consta otra causa directa se esconden, en realidad, caídas que marcaron el inicio de un rápido deterioro.

La prevención desde Atención Primaria es básica, como quiso resaltar este martes el consejero de Salud, Juan José Pedreño, al acudir al centro de salud de El Carmen para conocer el desarrollo del programa Otago. Los resultados son esperanzadores: el riesgo de caídas se reduce en un 35% entre quienes participan en el proyecto. También en los hospitales se están desarrollando programas de prevención, dirigidos a quienes ya han sufrido una caída y han requerido ingreso. Es el caso de La Arrixaca, de la mano de la Unidad de Geriatría.

Pero queda mucho por hacer. Además de extender Otago, que ha llegado a 312 pacientes en una Región en la que viven más de 71.000 mayores de 80 años, las estadísticas reflejan un importante margen de mejora en el abordaje de las fracturas de cadera. Un reciente informe del SMS advierte de que solo el 36,8% de los mayores de 65 años intervenidos entre los años 2016 y 2022 por una rotura de cadera entraron al quirófano en un plazo inferior a las 48 horas tras la caída, pese a que este es el criterio general establecido como indicador de calidad. Si se atiende únicamente a los datos de 2022, el balance es aún peor: solo el 27,7% de los pacientes con fractura se beneficiaron ese año de la cirugía precoz, lo que representa la tasa más baja de todas las comunidades autónomas.

El informe señala además que «se observan diferencias en el porcentaje de cirugía precoz entre las nueve áreas de salud que no parecen estar justificadas ni por la edad ni por la carga de morbilidad de las personas intervenidas». La mortalidad a 30 días oscila entre un 5,3% y el 9%.

De estos cuestionables resultados ya ha advertido en varias ocasiones la Asociación en Defensa de la Sanidad Pública (ADSP). El presidente de esta organización, el médico Abel Novoa, destaca que el hecho de que el SMS haya elaborado ahora un informe para abordar esta situación supone un «ejercicio de transparencia».

Pero además de las mejoras en el manejo de las cirugías, Novoa apunta a la importancia de la prevención. El propio informe del SMS destaca que en la Región de Murcia hay una mayor incidencia de caídas entre la población de más de 65 años, lo que debe llevar a indagar en las causas, apunta el presidente de la ADSP. «Tenemos al 40% de los pacientes mayores polimedicados, lo que representa el mayor porcentaje de toda España«, advierte. Muchos de ellos toman psicofármacos, y entre los efectos de esta medicación se encuentra un mayor riesgo de caída.