«Debe matar al padre»

«Mate al padre, de manera simbólica, y libérese de las ataduras, porque el anterior presidente ya es pasado», aconsejó el portavoz de Ciudadanos, Miguel Sánchez, al candidato del PP a la presidencia de la Comunidad, Fernando López Miras, para quitarse de encima una de las principales críticas con las que llegó al debate.

Con su acostumbrado discurso deslavazado y renqueante, Sánchez trató de mantenerse ajeno a la escalada dialéctica de Podemos, PSOE y PP, aunque no quiso dejar sin respuesta sus críticas. «Parece que el candidato a la investidura es de Ciudadanos», lamentó.

Acusó de sobreactuar a Óscar Urralburu, cuyo discurso incendiario interpretó en clave política interna. «Parece presionado por su secretario general, Pablo Iglesias, pero no me gusta y le pediría que vuelvan a la senda de la moderación», indicó. Mientras que a Tovar, que le había echado en cara el fracaso de que el imputado Pedro Antonio Sánchez siga como diputado regional, le contestó: «No será más bien un fracaso suyo por querer ser presidente con solo trece diputados».

Fue el que más atención prestó al discurso del candidato López Miras, del que dijo que «es la misma música pero con otro intérprete» y al que reprobó por «dedicar un tercio de su discurso a defender a su antecesor». Sánchez le pidió también que se comprometiera a acabar con el impuesto al sol y a negociar y pactar, pero no obtuvo respuesta a ninguna de las dos cosas.