Antonio López
Viernes, 25 de noviembre 2016, 01:32
«Era una pareja que lo tenía todo. Trabajo, salud y su hijo, que era su amor. Pero les llegó la desgracia. Estamos consternados». El sentir de una vecina de esa familia cartagenera, que anteayer sufrió un accidente de tráfico en Álava, es el mismo que el de toda la diputación de La Puebla, donde vivían, y de Torre Pacheco, donde tenían su negocio, la empresa de trabajo temporal Agriverdes del Mediterráneo. El luto y el pesar por el desgraciado suceso tiñeron no solo esas dos poblaciones, sino también La Palma, donde viven los padres de ella, y La Aparecida, donde residen los de él.
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La banderas a media asta y los crespones negros daban cuenta de lo queridos que eran Rubén Saura, de 29 años, y su hijo, de dos. La esposa y madre del niño, María Esther Solana, de 27 años, permanecía ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en estado grave y con pronóstico reservado, al cierre de este edición, según fuentes del Hospital Santiago Apóstol de la capital alavesa.
La familia estaba de paso por la provincia para visitar a unos clientes y a unos amigos, cuando el Range Rover de color gris en el que viajaba, matriculado hace apenas año y medio, impactó de forma consecutiva con dos camiones: un vehículo de gran tonelaje y otro de menores dimensiones. Los conductores de ambos transportes salieron ilesos.
Los familiares de la pareja pronto se trasladaron a Vitoria. El padre de Rubén, Francisco Saura, con quien pudo hablar 'La Verdad', dijo estar «destrozado y muy, muy triste. Ahora solo queda luchar por ella, que hoy [por ayer] ha mejorado un poco».
Pésame del Club de Atletismo
A los fallecidos se les practicó la autopsia ayer por la tarde, tras lo que se procedió a su traslado al Tanatorio Virgen del Pasico de Torre Pacheco, donde estaba previsto que llegaran la pasada madrugada, según indicaron fuentes próximas a la familia.
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Amigos y conocidos no daban crédito a lo sucedido ayer por la mañana. Los mensajes de condolencias no se hicieron esperar, sobre todo del Club de Atletismo de Torre Pacheco, al que pertenecía Rubén Saura desde hacía años. A través de la red social Facebook, expresaron su pena. Once atletas lucirán este fin de semana un crespón negro en sus dorsales en una carrera en Murcia.
«En el pueblo son muy conocidos por todos, por eso la bandera de la Asociación de Vecinos y otras están a media asta en señal de luto. Está todo el mundo consternado con lo que ha pasado», dijo el presidente de la Junta Vecinal de La Puebla-La Aparecida, Juan Manuel García Ayaso.
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Rubén y María vivían desde hacía años en La Puebla, en la calle La Horda. Ambos trabajaban en la empresa de trabajo temporal familiar, ubicada en Torre Pacheco, él como gerente de la misma y ella como administrativa.
La misa funeral de este cartagenero y su hijo se celebrará mañana, a las 10.30 horas, en la diputación de La Palma, donde serán enterrados, según indicaron fuentes familiares.
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