El atentado junto a la embajada en Kabul sacude la campaña electoral de la Región

A pesar de los 7.000 kilómetros que separan Murcia de Kabul, la onda expansiva del atentado que sacudió ayer por la tarde la capital afgana alcanzó a la capital de la Región de Murcia. El ataque suicida de los talibanes a varias casas próximas a la embajada de España encogió el corazón de miles de murcianos y obligó al PP a suspender el acto central de su campaña electoral, que tenía al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, como protagonista.

«No tenemos ánimo para este acto después de lo ocurrido», indicó Rajoy desde la tribuna al millar de seguidores que le aguardaron pacientemente y que ya se esperaban la mala noticia, a causa de los rumores que circularon durante los 45 minutos de retraso con que accedió al recinto y que dedicó en gran parte a saludar a los cientos de personas que se quedaron fuera por falta de aforo.

Rajoy venía de pronunciar un mitin en Orihuela que terminó de forma repentina anunciando la muerte del primer policía español y su entrada en el pabellón Cagigal fue respetuosa con los acontecimientos que todos tenían en mente. No sonó el himno del PP que abre todos los mítines electorales, y tan solo unos tímidos aplausos y algunos gritos de «¡presidente!, ¡presidente!» acompañaron la subida del presidente al escenario.

«Debemos expresar nuestro sentir y pesar, y nuestro apoyo a la Policía Nacional, a la Guardia Civil y a nuestros Servicios de Inteligencia», indicó en el acto de Murcia tras informar del fallecimiento del agente en el atentado de Kabul. El presidente estaba flanqueado por el jefe del Ejecutivo autónomo, Pedro Antonio Sánchez, el presidente regional del PP, Ramón Luis Valcárcel, y el número uno de la lista popular al Congreso, Teodoro García.

Dio las gracias a los asistentes, con los que se comprometió a «seguir dando batalla, que es lo que se merecen los españoles». «Hoy todos podemos estar orgullosos de los Cuerpos de Seguridad del Estado. Nos ayudan, nos cuidan y trabajan por nuestra libertad y seguridad». Fueron las últimas palabras del mitin más breve de Mariano Rajoy.

En una conversación informal con algunos periodistas tras el frustrado acto de Murcia, el presidente explicó que seguirá en contacto con los líderes de los demás partidos políticos tras el ataque de Kabul y que, en principio, se mantiene la campaña electoral.

La campaña sigue

Rajoy indicó que había hablado con el líder socialista, Pedro Sánchez, y con el de Podemos, Pablo Iglesias, en ambos casos antes de conocerse la muerte del policía, mientras que al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, le mandó un mensaje porque estaba interviniendo en un acto de campaña. Señaló a los informadores que el ataque fue contra un hospedaje que habitualmente acoge a ciudadanos estadounidenses y que está junto a la embajada española.

Antes de dejar Murcia, precisó que no tiene constancia de que haya ningún otro español herido en Afganistán y, sobre la posibilidad de reactivar el pacto antiyihadista, se remitió al Ministerio del Interior.

Rajoy declaró que en principio no se debe suspender la campaña electoral, aunque probablemente, agregó, se haga algo desde el Ministerio del Interior en recuerdo del policía fallecido, según informó Efe

En la agenda de presidente del Gobierno no figura para hoy ningún acto de partido, pero sí está prevista su aparición por la tarde en el programa de María Teresa Campos, 'Qué tiempo tan feliz', de Telecinco.