Un estanco de Casillas sufre un nuevo asalto de la 'banda del tabaco'

La crisis y las constantes subidas del precio del tabaco han disparado los robos de esta mercancía en los estancos de la ciudad de Murcia y sus pedanías. El último se produjo durante la madrugada del lunes, en torno a las tres y media de la noche en la calle Pino de Casillas. Según los estanqueros, se han producido en los últimos meses al menos cuatro asaltos a varios estancos.

«Se han metido al almacén y han cogido cuatro cajones de tabaco. También se han llevado la caja entera, con unos 1.000 euros aproximadamente», explica Juan Montoya, encargado del estanco. El 'modus operandi' de los ladrones es siempre el mismo. «El robo se produce casi siempre forzando la cerradura o rompiendo un cristal para llevarse el producto. Yo creo que han estado tiempo vigilando el horario, cuándo se abre y se cierra la puerta» señala Montoya.

Los estanqueros están preocupados porque la noticia de los asaltos ha corrido entre ellos como la pólvora. «Entre nosotros hablamos y comentamos; creemos que esto es una mafia que va a por el tabaco. Quieren dinero fácil», relata el encargado del último establecimiento asaltado.

El tabaco que se roba a los estanqueros acaba en manos que lo venden a un precio más bajo en quioscos, en la calle o incluso en bares, denuncia el gremio.

Para tratar de evitar los robos, Montoya pide más seguridad. «Aunque da igual, entran con los coches y te lo dejan hecho un desastre. Lo que toca es aguantar y que no te toque», concluye resignado. A finales de mayo, la 'banda del tabaco' ya desvalijó el estanco de María del Carmen Espinosa en El Puntal. «¡Estamos vendidos! Reventaron el escaparate, entraron y se llevaron la saca del tabaco, el ordenador y la caja registradora. La Policía no nos dice nada, y ya no sabemos qué hacer para que se acaben los robos, porque ya han entrado cuatro veces», lamentaba entonces. Los propietarios de los estancos ubicados en Espinardo, Cabezo de Torres y Churra denunciaron «una oleada de robos».