JORGE G. BADÍA
Jueves, 31 de octubre 2013, 18:43
La tensión se podía cortar en la noche de ayer en el centro social de Macisvenda, durante la reunión informativa que el Ayuntamiento de Abanilla convocó para explicar los detalles del proyecto para instalar una cementera en una falda en la Sierra del Cantón. A la reunión acudieron representantes de Cementun Veritas y el primer teniente de alcalde, Pascual Martínez, con el objetivo de aclarar los pormenores técnicos de la planta y de las 168 alegaciones que ha recibido el proyecto. Pero los vecinos de Macisvenda, Hondón de los Frailes, El Cantón y la pedanía oriolana de Barbarroja, que estaban molestos por la posible repercusión acústica y de contaminación que pueda traer consigo el proyecto en sus viviendas, terminaron de explotar y criticaron duramente a los empresarios y a las autoridades municipales. De hecho, llegaron a cargar verbalmente contra la Policía Local.
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