Lotería de Navidad 2012: Todas las anécdotas del sorteo

Como el título de la famosa canción 'Mañana sale', que Conchita Piquer cantó a la Lotería, mañana saldrá el Gordo del gran bombo de la Lotería de Navidad que ya está en el Teatro Real. No sabemos si el número premiado será 'de doña Manolita' como dice la canción, lo único que tenemos claro es que los nervios ya cosquillean nuestro estómago y con tan sólo imaginar que podemos ser los ganadores de los grandes premios de la Lotería de Navidad un escalofrío nos recorre todo el cuerpo.

Una vez superado el fin del mundo pronosticado por los mayas, todo sigue su curso. Mañana, y como cada 22 de diciembre, se celebra el sorteo más esperado del año. A estas alturas ya conocemos todos los datos e incluso la historia de la Lotería de Navidad . Sabemos quiénes son los que más compran, las terminaciones más demandadas este año, la historia de los niños de San Ildefonso, cómo se prepara todo la noche antes del sorteo, los ritos y tradiciones para evocar la suerte Pero, ¿nunca te has preguntado cuáles son algunas de las anécdotas más curiosas del sorteo de Lotería de Navidad?

La suerte es caprichosa e indecisa pero muchas veces no va sola, lleva consigo una acompañante: la casualidad. Juntas son capaces de crear historias difíciles de creer como la de un hombre malagueño que soñó con un número, el 55.666 y supo inmediatamente que ese sería el número del Gordo. A pesar de las risas y las miradas incrédulas de la gente, todo aquel que había pensado en que el hombre había perdido la cordura se quedo boquiabierto al conocer la noticia del número ganador del primer premio. Esta historia de premoniciones propia de película ocurrió en 1949 y es una de las más conocidas.

Más reciente y más hablada es la historia de un chico inmigrante residente en España. En unos instantes la suerte decidió que su cuenta bancaria no podía estar en blanco y la pintó con los 300.000 euros del Gordo que el sorteo de Lotería de Navidad repartía en 2009.

También es curiosa e inquietante la anécdota que ahora pueden contar dos amigos sevillanos. Ambos compraron dos décimos, uno en Madrid y otro en Sevilla, sin saber que iban a ser tocados por la suerte por partida doble: les tocó el Gordo y el segundo premio.

Mañana es el gran día y quizá tu historia forme parte de una de las grandes anécdotas que la Lotería de Navidad recoge a lo largo de los años. Y es que, doscientos años después no se cansa y cada año llega con más fuerza y cargada de millones de sueños.