Llaneando La Escucha

La Escucha,

L os cultivos de regadío se entremezclan en La Escucha con las nuevas urbanizaciones. No es una diputación muy lejana del centro y muchos la están eligiendo como lugar de residencia habitual. Viviendas más baratas, más tranquilas, con servicios básicos y sin el ajetreo urbano de otras zonas. Las plantaciones siguen estando presentes porque la mayor parte de las familias viven de ellas.

A esta diputación se accede por la carretera de Águilas cogiendo luego la carretera que conduce a la localidad almeriense de Pulpí. se puede llegar por otros caminos pero éste es el más directo y el que mejores condiciones presenta. Precisamente la carretera es la que divide la superficie de la pedanía donde en los últimos años han proliferado las viviendas unifamiliares y construcciones decoradas con infraestructuras deportivas.

Algo debe tener La Escucha cuando todos los vecinos aseguran que el mayor patrimonio de la diputación es el vecindario. Una especie de nube de parece reinar, al menos, en las zonas más pobladas.

Las máquinas agrícolas forman parte del paisaje al igual que los cultivos, los que están al aire libre, y los que se protegen bajo plástico. Las placas solares son los nuevos inquilinos. Empresas de importancia en la ciudad tienen su sede en la pedanía en la que actualmente hay censadas 875 personas.

Las montañas de semanas pasadas han dejado lugar a la llanura de esta parte del término municipal que esconde otros atractivos como el pequeño núcleo de la Escarihuela con un puente que cruzar inundado de árboles matorrales, y una pequeña ermita. El turismo rural también ha encontrado su hueco, al igual que una importante población de tortuga mora.