Las discotecas de la zona de Atalayas se llenaron y no registraron incidentes

Las discotecas de la zona de Atalayas se llenaron a tope, con público de todas las edades, dispuesto a divertirse y pasar una feliz velada.

Rafael Abellán, propietario de la discoteca Novo y Nocturno, apuntó que en ambas hubo un excelente ambiente, sin problemas: «La gente controla más el alcohol y ya no se emborracha tanto como antes». En sus dos locales se bailó hasta el amanecer, pero sin que tuvieran ningún tipo de incidencias.

Respecto a los bares de la zona de Alfonso X y Universidad, también Rafael Abellán, que posee varios locales como Código y Lancelot, apuntó que la tónica había sido igualmente de tranquilidad. La gente se divirtió, bailó y se tomó algunas copas, pero sin ocasionar ningún tipo de desmán.

Pese al frío nadie se quedó en casa. Después de tomar las uvas, los locales registraron gran afluencia de personas que salieron a vivir las primeras horas del Año Nuevo en compañía de amigos, música y el calor de los locales de moda. En todos hubo lleno, según confirman los distintos propietarios, que estiman que fue una excelente Nochevieja.