La infanta Sofía, la última Borbón, cumplió ayer 10 años

Era 29 de abril, domingo, las cuatro y media de la tarde aproximadamente. La entonces princesa Letizia daba a luz a su segunda hija por cesárea programada. El nombre todavía no estaba concretado, ella y Felipe pensaban que Olga, pero cuando la pequeña asomó a la vida lo tuvieron claro, se llamaría como su abuela, Sofía.

Ayer, la más pequeña de la casa Borbón cumplió 10 años, desde su nacimiento no se ha recibido a otro miembro en la Casa Real española, lo que la convierte en el último eslabón del linaje Romanov y la última Borbón. Su nombre completo es Sofía de Todos los Santos de Borbón y Ortiz, pero estuvo a punto de llamarse Olga, por herencia familiar. Finalmente, Felipe comunicó a su madre la noticia: «Se parece mucho a Leonor. Hemos decidido que se llame como tú», le dijo el actual rey a su madre, entonces reina.

La Infanta Sofía llegaba al mundo en el momento más trágico de la vida de su madre. Su hermana Erika Ortiz se marchó para siempre unos meses antes, lo que la invadió de pena en su última etapa de embarazo. La pequeña Sofía era el primer rayo de sol de un invierno muy lluvioso y gris en la vida de Letizia.

Ayer, la Casa Real celebró los diez años de vida de la pequeña Sofía, poco se sabe de la celebración, aunque no corren buenos tiempos en Zarzuela desde que se supiera la sentencia del caso Noós. Ella es la segunda hija de los actuales reyes, lo que la convirtió en hermana de la futura reina y actual princesa de Asturias. Es un papel que podría resultar traumático para muchos niños, pero sus padres se encargan de darle una educación idéntica a ambas para que ese rango inferior en la línea sucesoria no influya en su crecimiento.