Gran Hermano 17: Bea y Rodrigo ya experimentan con el 'edredoning'

Rodrigo y Bea son la única pareja que queda viva en Gran Hermano 17. Aunque Alain y Meritxell hayan tenido un rollo con repetición incluída, lo cierto es que ellos nunca han llegado a ser pareja y, al parecer, no llegarán a serlo tampoco. Por esta razón, Naranjita y su amor son los únicos que pueden dar momentos de pasión a los seguidores de Gran Hermano.

Pero su pasión se está haciendo de esperar. De momento, Bea y Rodrigo son sólo amigos que se besan por la casa y a veces también discuten. No obstante, la pasada noche, Adara y Meritxell escucharon unos ruidos extraños que provenían de la habitación de Bea y Rodrigo, más concretamente, de su cama.

La azafata y su amiga en Gran Hermano 17 estuvieron espiando la habitación por el borde de la puerta pero poco veían, sólo escuchaban. Teniendo en cuenta eso, se apreciaban una especie de gemidos de Bea y las chicas se preguntaban ¿qué estarán haciendo debajo de las sábanas? Una especie de pregunta retórica, porque Adara sabe bien lo que pasa debajo de las sábanas de Gran Hermano.

Cuando la cámara infrarroja volvió al cuarto, con las cotillas ya lejos de él, se podía ver que entre Rodrigo y Bea no podía estar pasando mucho. Teniendo en cuenta la distancia y la poca movilidad que se apreciaba bajo el edredón, se veía poco probable un 'edredoning' entre Bea y Rodrigo.