c. garcía
Miércoles, 6 de abril 2016, 12:47
Antes de ser una 'big celebrity', Kim Kardashian era la mayor de una familia algo excéntrica. Es cierto, no eran pobres, pero el apellido Kardashian era un apellido más en el censo de Estados Unidos. Ahora, gracias a ella y a toda su familia, Kim Kardashian es una 'superstar' acostumbrada a que le persigan allí a donde va y a los flashes de las cámaras de foto.
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En su blog, Kim Kardashian ha contado en un vídeo las recomendaciones que le dio su asesor, Jonathan Cheban, para ser toda una famosa, con mayúsculas. Kim Kardashian explica que antes, solía saludar a todos los paparazzi, les contestaba a las preguntas, sonreía a las cámaras, porque así salía mejor en las fotos... Pero Cheban le dijo que parara con todo eso.
Así que para ser toda una celebridad, según Cheban, Kim Kardashian tenía que ponerse siempre para ir por la calle unas grandes gafas de sol, bajar la cabeza, nunca sonreir y nunca hablar con los paparazzi. El ejemplo a seguir de Cheban era Victoria Beckham y lo cierto es que Kim Kardashian no lo ha hecho nada mal.
Aunque cuando camina por la calle Kim Kardashian sea un personaje hermético, lo cierto es que cuando acude a fiestas es muy natural. De hecho, ella dice que sigue siendo muy humilde, "cuando conocí a Jennifer López corrí a hacerme una foto con ella. No pude dormir esa noche de la emoción".
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