c. garcia
Viernes, 25 de septiembre 2015, 01:16
Sofía era la primera en nominada en salvarse. Los porcentajes estaban muy igualados, apenas un 51% contra un 49%. La cosa estaba entre Maite y Raquel y, aunque los espectadores eran conscientes de que la madre de Sofía era insoportable para la convivencia, preferían la energía de la conductora de autobuses a los llantos de la fisioterapeuta.
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Maite pasó de ser la elegida de Dios a ser la elegida por la audiencia para abandonar Gran Hermano 16 . La casa de Guadalix se queda sin su guerrera oficial y el restos de concursantes ya respiran tranquilos. Algunos habían confesado tener miedo de Maite y sus desorbitadas reacciones. La gracia natural y la locura momentánea de la primera expulsada de Gran Hermano 16 pasarán a la historia del reality de Telecinco.
Previa a su entrevista con Mercedes Milá, la presentadora parecía temer la llegada de Maite al plató. No era para menos, después se demostró que la que ya no era concursante de Gran Hermano 16 casi no deja a la presentadora hacer su entrevista. A pesar de ver su comportamiento en cada vídeo que le ponían, Maite no recapacitaba, es más se reafirmaba en su papel de 'elegida de Dios'.
La mejor parte de la expulsión de Maite, se la lleva Sofía. La joven ya hacía cuentas con la salida de su madre; la joven cree que ahora podrá tener una relación más libre con Suso , así como mejorar su relación con el resto de concursantes de Gran Hermano 16.
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