Ana de Dios
Viernes, 23 de febrero 2024, 09:00
El café es una de las bebidas más populares y consumidas en todo el mundo. La gran cantidad de variedades que se pueden elaborar hacen las delicias de los amantes de esta bebida, que se ha convertido en la protagonista por excelencia de los desayunos y sobremesas. Si bien, es posible encontrar un gran número de cafeteras, de diferentes estilos y que más se ajustan a los gustos del cliente, una de las más conocidas es la italiana.
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También conocida como cafetera moka, esta herramienta es perfecta para conseguir de forma casera un café expreso a baja presión. Este aparato cuenta con tres partes: la inferior en la que se deposita el agua, el filtro donde se colocará el café molido y finalmente la superior por la que saldrá el café ya listo.
Sin embargo, aunque su funcionamiento es muy sencillo, hay algunos errores que pueden influir en el sabor final del café. Uno de los principales fallos que suelen producirse al utilizar una cafetera italiana es dejar la tapa cerrada durante el proceso. Y es que los baristas profesionales aseguran que es muy importante mantenerla abierta mientras se hace.
También es fundamental tener especial cuidado con la limpieza de esta máquina. Muchos piensan que la mejor opción es emplear jabón para eliminar los restos que queden en ella, sin embargo, este producto puede dejar residuos y afectar el sabor del producto que en ellas se prepara, ya que se basa en compuestos químicos. Por ello, se aconseja utilizar una mezcla elaborada con vinagre y agua, la clave está en poner la misma parte de ambos ingredientes.
La cuenta de TikTok @sannjorge_cafedelbueno, ha compartido otros errores bastante comunes que se suelen cometer al utilizar una cafetera italiana y que pueden repercutir en el sabor y la calidad del sabor del café.
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El primero de ellos es poner el café mientras se calienta el agua. Según explica este experto, «nunca» se debe hacer, ya que esto va a producir que «se liberen muchos vapores calientes que van a quemar el café». En este caso, deberás poner la parte inferior en el fuego para que coja la temperatura adecuada y en ese momento introducir el filtro y terminar de montar la cafetera. Ayúdate de un paño para evitar quemarte, ya que el recipiente al ser de hierro estará muy caliente.
El fuego es otro de los factores a los que también hay que prestar atención. Si bien se recomienda que este no este muy fuerte, tampoco es aconsejable que esté demasiado bajo: «Si está muy suave, el café estará mucho tiempo en contacto con el calor y se quemará. Si lo pones muy fuerte el café saldrá muy rápido y no se infusionará correctamente, quedará aguado».
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El tercer y último error que enumera es dejar mucho tiempo el café en la cafetera muy caliente o en el fuego. «Esto va a alargar el tiempo de contacto del metal caliente con el café y la bebida se va a arruinar», señala este experto.
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