Si quieres conquistar a tus comensales pero no te ha quedado mucho tiempo para preparar un postre después de invertirlo en un gran menú, aquí te mostramos como hacer un último plato sencillo pero muy refinado en apariencia, a la vez que delicioso.
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Para empezar, hay que preparar un almíbar poniendo en un cazo la misma cantidad de agua que de azúcar, llevar a ebullición un par de minutos y listo. Podemos enriquecerlo con menta, ron y ralladura de naranja.
Con el melón haremos una sopa fría triturando la fruta y añadiento un poco del almíbar de menta.
Ya sólo queda montar la tarta. Pondremos los sobaos como base y los tintaremos con el resto del almíbar. Decoramos con nata montada por encima, el spray nos permitirá hacerlo con un bonito dibujo. Espolvoreamos un poco de cacao sobre la nata. Ponemos alrededor la sopa fría de melón y para darle el toque final podemos decorar con hojas de menta y frambuesas.
Melón
sobaos
cacao en polvo
frambuesas
hojas de menta
ron
azúcar
ralladura de naranja
un bote de nata montada en spray
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