Si no quieres dar a tus hijos galletas fabricadas de forma industrial cargadas de azúcares y grasas poco saludables te proponemos esta receta sana y deliciosa que hará de tus meriendas una fuente de salud, energía y sabor.
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Para empezar debemos tener la mantequilla a temperatura ambiente para poder trabajarla bien. Hay que echarla en un bol junto con el azúcar y mezclarla. A continuación agregamos la harina tamizada, la levadura y una pizca de sal, removiendo hasta que se integre todo.
Después añadimos 1 huevo, las semillas de sésamo y los copos de avena, y amasamos hasta obtener una masa homogénea. La envolvemos en film transparente y la dejamos reposar 1 hora en el frigorífico.
Transcurrido ese tiempo, precalentamos el horno a 160º y forramos con papel de horno una bandeja. Formamos bolas con la masa del tamaño de una nuez y las aplastamos, las ponemos sobre la bandeja de horno dejando una pequeña separación entre ellas para que no se nos peguen.
Batimos el otro huevo y pintamos las galletas con ayuda de una brocha, espolvoreamos por encima las semillas de chía y metemos al horno. Horneamos durante 12 minutos, subimos el horno a 200º y horneamos durante 5 minutos más o hasta que estén doradas. Retirar y dejar enfriar sobre una rejilla.
150 gr de Harina
1 cucharadita de levadura en polvo
100 gr de Mantequilla
60 gr de azúcar moreno
2 huevos
150 gr de copos de avena
30 gr de semillas de sésamo
10 gr de semillas de chía
sal
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