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Hubo un tiempo en que el mercado de Navidad jalonaba la orilla del río. A lo largo de su baranda, los puestos con turrones y dulces lanzaban su goloso reclamo. Los 'capacicos' llenos de cascaruja. Enfrente de la plaza de Verónicas, 'la recova', con orondos ... pavos, pollos de cresta roja, hermosas gallinas, los andróginos capones, cestos de mimbre llenos de huevos, necesarios en los dulces pascueros y en las pelotas del cocido. A la vera de Santa Catalina, y de la Catedral, los puestos de la ilusión, con figuritas de los belenes. En otros países europeos ponen mercadillos deslumbrantes, pero el nuestro se la juega con los mejores.

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laverdad Mercadillos polacos