Helado de espaguetis: dónde probar en la Región de Murcia el postre alemán más viral

Con esta materia prima elaboró una creación que no se come con tenedor ni tampoco se puede pedir 'al dente'. Se trata de un helado de espaguetis, bautizado como Spaghettieis, que se ha consolidado como la seña de identidad de esta ciudad. Tanto que se considera un imprescindible para todo aquel que ponga un pie en ella.

Este trampantojo está elaborado únicamente con tres ingredientes: helado de vainilla para simular los espaguetis por su semejante tonalidad, sirope de frambuesa, fresas y frutos rojos para falsear la salsa de tomate y, para culminar, chocolate blanco rallado para imitar las virutas del queso parmesano.

La buena noticia es que no hay que acudir al país germano para probar este curioso postre. La Región de Murcia cuenta con una establecimiento que se ha animado a seguir los pasos de Fontanella Eismanufaktur MA, el local inventor, a orillas del Mediterráneo. Para ello, tan solo hay que desplazarse hasta la heladería Venezia de Águilas.

Por si esta creación no fuera lo suficientemente original, este local ha alimentado la carta con múltiples variantes: la 'pasta' encima de un crêpe, cubierta con chocolate negro, acompañada de un barquillo y hasta modificando las bolas para conseguir nuevos sabores. Unas opciones que triunfan desde que las expusieron hace ya varios años.

La sencillez de este ingenioso postre invita a calcar la fórmula en casa. Tan solo será necesario una prensa de fideos de acero inoxidable para transformar el helado en tiras largas cilíndricas. Esta máquina se puede adquirir en tiendas especializadas o en páginas como Amazon o Aliexpress. El 'gelato' elegido para la base deberá contar con un color similar al de la pasta, como la vainilla, coco, 'cookie' o dulce de leche.

Tras introducir las bolas en este utensilio, hay que apretar con fuerza para que los espaguetis discurran hasta el plato. Una vez que se tiene una cantidad considerable, se debe seleccionar una salsa dulce de color rojizo para pincelar toda la superficie. Finalmente, se ralla chocolate blanco para darle un toque extra de realismo.