
Una de las fortalezas de este restaurante es su ubicación: la Plaza del Arco, en Caravaca de la Cruz, un entorno monumental, cargado de piedras que cuentan historias, con una terraza desde la que empaparse de la esencia de Caravaca, y más este año jubilar que ahora comienza, mientras uno da cuenta de las numerosas especialidades de tapas y cocina mediterránea y clásica que ofrece el establecimiento. Dentro, salones con sabor añejo, decoración años 50, con piedra, madera y cristal. Y la carta, un extenso abanico de posibilidades. Solo el menú diario, por 12 euros ofrece a elegir entre más de diez primeros y diez segundos, postre o café y bebida. Mini carpaccio de merluza con salsa ajoalmendra, tartaleta rellena de gambas, alcachofas maceradas, caramelo brick relleno de carrillera ibérica, boquerones, mejillones, pescados, mariscos y carnes... y patatas fritas ¡caseras! Pero, sobre todo, carnes de cabrito y cordero segureño y guisos locales.
Ofrece un menú medieval, donde encontramos codillo de cerdo en su jugo, y menú mercadillo, los días en los que se celebra, con bacalao en salsa ajotomate. Y alrededor: mucha historia.
Dirección: Plaza del Arco, Caravaca de la Cruz Teléfono: 968 073 470.
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