Una jornada sin incidentes destacables

Más de cuatrocientos agentes de la Policía Local de Murcia y de la Policía Nacional formaron parte del dispositivo preparado para velar por la seguridad de las miles de personas que participaron ayer en la Romería de vuelta de la Patrona de Murcia, la Virgen de la Fuensanta, a su santuario en el monte. Una jornada que transcurrió sin incidentes destacables, según informaron fuentes del Ayuntamiento de Murcia. Al despliegue policial se sumaron voluntarios de Cruz Roja y Protección Civil, para colaborar en las atenciones sanitarias, y el refuerzo con medio centenar de efectivos del Plan Infomur, de lucha contra los incendios forestales de la Comunidad Autónoma.

En total, se realizaron 36 asistencias sanitarias leves, entre Cruz Roja y Protección Civil, la mayoría por mareos y otras por heridas o contusiones. El extravío de un niño fue «rápidamente resuelto». Además y con motivo de la lluvia, la gente comenzó a bajar por el mismo recorrido de subida y se produjo un «peligroso tapón» a la altura del club de tenis de Algezares. Hubo que desviar la bajada de romeros desde la explanada «y se solucionó al poco tiempo», según el Ayuntamiento.