Un líder de Mazarrón, un goleador de Yecla y una salvación histórica celebrada en toda Cartagena

El Tenerife rara vez compareció en el Cartagonova, apagado o fuera de cobertura durante cuarenta y cinco minutos muy pobres. Aitor Buñuel lo pasó francamente mal desde el principio, muy exigido por un resolutivo Luis Muñoz y superado cuando Jairo, que ha ido de menos a más, apareció por la banda izquierda. Hasta Mellot quedó amonestado a los dos minutos y pudo ver la segunda cartulina amarilla poco antes del descanso.

Poca cosa de los tinerfeños, que en ningún momento parecieron jugarse las remotas opciones de pelear por la sexta plaza del 'playoff' de ascenso. Para colmo ni siquiera estuvo en el banquillo el entrenador, Asier Garitano, cuestionado desde hace bastantes jornadas por mantener en tierra de nadie al Tenerife.

La primera parte más cómoda de la temporada quedó resuelta con un doblete de Alfredo Ortuño. El delantero yeclano reafirmó su olfato goleador en esta tercera temporada en el club y en este 2024 en especial. El '9' fue clave en la vital victoria de hace unas semanas en el Ciudad de Valencia y ayer se encargó de poner mucha tierra de por medio. En el minuto 6 hizo buena la asistencia al primer palo de Jairo y antes del descanso engaño a Soriano en una pena máxima provocada por Alcalá.

Ortuño es el jugador que más veces ha vestido la albinegra esta temporada, está dispuesto a continuar en el Cartagena y este curso, sin duda el más difícil de todos, ha sido el referente en los buenos pero sobre todo en los peores momentos del equipo. Siempre remó y nunca se rindió. El premio son sus once goles, diez de ellos en la liga regular. El ariete le ganó además todos los balones aéreos a Sergio González y a Loic Williams

El Cartagenerismo quedó huérfano de sus grandes referentes el pasado verano, cuando Luis Carrión y De Blasis abandonaron el Cartagena y cerraron una etapa inolvidable en el Cartagonova. El entrenador y el jugador eran uña y carne, líderes, agitadores, complementarios y prolongación el uno del otro en el banquillo y en el terreno de juego. Víctor Sánchez del Amo no cuajó y el capitán Marc Martínez se marchó en enero. Ha sido en este 2024 cuando el Efesé ha recuperado en Alcalá a ese líder de la manada. El mazarrón es la viva imagen del fútbol de Calero y lleva un año notable, punta de lanza en la defensa y motivador en todo momento del vestuario. Su fusión con la grada se había visto pocas veces en Benipila.

El Cartagena fue un equipo ambicioso en la segunda parte, a pesar del 2-0 a favor. Los albinegros tuvieron un par de llegadas muy claras para redondear la tarde con el 3-0. En una contra, Arnau Ortiz se empachó de balón dentro del área y con todo a su favor; mientras que Soriano evitó con una formidable estirada el gol de Tomás Alarcón en un disparo con rosca. En el otro extremo, Lizoain evitó cualquier susto con algunas intervenciones y el exalbinegro Bodiger recibió un caluroso aplauso en su regreso al Cartagonova.

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El Cartagena ha hecho realidad el milagro de la salvación, algo impensable en enero con 15 puntos y 3 victorias en 21 jornadas. Hundido en lo más profundo de la clasificación, el objetivo llegó a estar a once puntos de distancia en el descanso del partido contra el Villarreal B. Los albinegros no solo han salvado la categoría de forma matemática con tres jornadas de margen, sino que además lo ha hecho a un alto precio: estableciendo dos records histórico. Primero, con la mejor vuelta del club en Segunda, de 36 puntos, por encima de los 34 de JIM en 2009 y los 33 de Carrión en 2022. Y segundo, consiguiendo cuatro victorias de forma consecutiva por primera vez en las siete temporadas del club en la categoría. El máximo siempre fueron tres hasta ayer: Oviedo (2-0), Levante (0-1), Alcorcón (1-0) y Tenerife (2-0), todas encima sin encajar gol.