Cita con las urnas y con Carlos Alcaraz. La agenda de muchos ciudadanos que ejercieron este domingo su derecho al voto en las elecciones europeas estuvo marcada por la final de Roland Garros disputada por el tenista de El Palmar, en la que conquistó París. Un partido que pintaba histórico y que amenazaba ayer por la mañana con dejar sin siesta a los seguidores del deportista murciano. «Sería un regalo que ganara para celebrar por todo lo alto el Día de la Región». Era lo más comentado en las mesas instaladas en el colegio electoral instalado en el CEIP Nuestra Señora del Rosario de Santomera, mientras en el municipio tenía lugar el acto institucional en el que se conmemoró el 42 aniversario del Estatuto de Autonomía.
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Rosi Belmonte lo tenía claro. Después de ir a votar, su único plan sería pasar la tarde en el sofá, «con el aire acondicionado puesto» para disfrutar del «orgullo 'murcianico» que siente al ver triunfar a Carlitos. Horas después de depositar su papeleta en la urna vestida con ropa deportiva, el deseo de esta vecina santomerana se cumplió y puso la guinda a un día intenso. «Me he levantado a las 7 de la mañana para hacer una ruta por el Pantano y después me he ido a Orihuela a subir la Cruz de la Muela», detallaba con un buen chute de adrenalina en el cuerpo. «He madrugado mucho para que me diera tiempo a todo y poder cumplir con mi obligación como ciudadana porque no hay excusas para no votar», destacaba.
La afluencia fue aumentando alrededor del mediodía, a pesar de que los termómetros superaban los treinta grados en la mayor parte de la geografía murciana. «En Murcia tiene más mérito salir de casa para venir a votar con este calor que hace ya», resaltaba Jaime Martínez acompañado de su mujer después de ejercer su derecho al voto en el centro de la capital del Segura.
Fernando Rey también se atrevió a depositar su papeleta antes de que el calor diese una tregua. «Hubiera venido esta tarde, pero soy bastante fan de Carlos Alcaraz y como no se sabe cuánto durará el partido, he adelantado la votación para verlo tranquilamente», explicaba este opositor a las puertas del colegio electoral del Museo de San Esteban, donde también acudieron Laura León y Adrián López. «Me he presentado a las 8 de la mañana porque era suplente en una mesa, pero al final no he tenido que quedarme y he aprovechado la mañana para ir a Torrevieja a hacer unas gestiones familiares. La playa estaba llena», aseguraba Laura al mismo tiempo que su marido apuntaba que «a ella le haría ilusión vivir alguna vez la fiesta de la Democracia desde dentro».
Sobre la importancia de los comicios –que transcurrieron con normalidad y sin incidentes en los 577 colegios repartidos por la Región, según confirmaron fuentes de la Delegación del Gobierno–, este votante murciano resaltaba que «hay quien no le da valor a estas elecciones porque creen que no nos afectan, pero muchos de los temas trascendentales se deciden en Europa y es fundamental que, tal y como está el mundo, todos votemos». Algo en lo que coincidía Amparo Peña, que llegó acompañada de su perra 'Maggi', una obediente labradora que despertó la atención de los presentes. «Quien no vota, no se puede quejar», advertía. Después de echar la papeleta en la urna su plan estaba claro: «Me voy a tomar el aperitivo y después a casa; tengo cita con Carlos Alcaraz».
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