El sondeo elaborado para LA VERDAD por GAD3, con mil encuestas, 369 más que el estudio del CIS, apunta a una victoria nítida del PP frente al PSOE, que retrocedería tres escaños respecto a 2019. López Miras sumaría más votos que toda la izquierda, lo que le permitiría gobernar en solitario si Vox se abstiene, aunque necesitaría el apoyo de esta formación en la Asamblea para sacar sus iniciativas al quedar lejos de la mayoría absoluta. Los de Abascal podrían duplicar su representación, Podemos también crecería y la formación cartagenera MC daría la sorpresa porque con el 3,3% de los votos tendría respaldo suficiente para entrar en la Asamblea. El sondeo arroja también claves interesantes sobre la transferencia de apoyos y el perfil de los votantes de cada partido político.
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Especial atención merece el comportamiento electoral de los jóvenes, que se han convertido en objeto de deseo de todas las formaciones. 64.246 murcianos votarán por primera vez este 28-M y la franja de edad entre 18-30 años supondrá el 17% del electorado. El interés por pescar en ese caladero no solo se debe al volumen total de papeletas que representan en las urnas, sino también porque es una parte del electorado cuyo posicionamiento ideológico todavía no está sedimentado y resulta más fácil a priori captar su respaldo.
En las últimas semanas hemos visto cómo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente regional, Fernando López Miras, han orientado gran parte de sus mensajes y ofertas hacia esos nuevos votantes. De hecho, en muchos aspectos, ambos han seguido una trayectoria preelectoral con muchos paralelismos. Una vez aprobados los Presupuestos de 2023, los más expansivos de la historia, el murciano hizo su crisis de Gobierno y abrió la caja para multiplicar las ayudas públicas, prometer proyectos y cerrar acuerdos sindicales. Y Sánchez, una vez solventadas las cuentas públicas, y hechas las polémicas reformas de los delitos de sedición, malversación y la reforma de la ley del 'solo sí es sí', también tiró de chequera para regar con fondos públicos la precampaña. Sánchez puso el foco en los jóvenes y anunció en los últimos fines de semana avales del ICO para la compra de vivienda y descuentos del 50% y el 90% para que los jóvenes viajen en tren por Europa y España. Mientras, López Miras, que se abrió un canal en TikTok, fichó como número dos a una joven periodista y retransmitió por Instagram un encuentro con jóvenes en una sala de conciertos, aprobó un plan de 13 medidas de apoyo para este colectivo, que incluye desde ayudas de hasta 150 euros para adquirir equipos informáticos y nuevas becas para universitarios de familias vulnerables a ayudas al alquiler de hasta 360 euros y abonos de 100 euros para participar en campamentos y encuentros juveniles. Lo último ha sido prometer subvenciones para el carné de conducir y transporte público gratuito en fin de semana.
Sin embargo, la encuesta de GAD3 muestra que el peso específico de los votantes jóvenes es dispar, siendo superior en las formaciones de derecha. El 10% de los encuestados que van a votar al PP son menores de 30 años, una cifra que se dispara en el caso de Vox: el 27% de sus votantes son jóvenes. En PSOE y Podemos ese peso relativo es del 9% y 8%, respectivamente. No es extraño que algunos partidos, como Vox, hayan trabajado mucho la comunicación a través de las redes sociales, no solo por que allí están durante muchas horas los jóvenes, sino porque es mucho más fácil ahí lanzar mensajes emocionales, sin filtros que aseguren la veracidad.
La subasta general de promesas dirigidas a los jóvenes parece fruto de la improvisación. Si hay un plan global, no se conoce. Ha empezado la campaña y ningún partido ha presentado un programa electoral que permita vislumbrar la Región de Murcia a la que aspiran. Aquello de programa, programa, programa de Julio Anguita quedó muy atrás. Eso sí, todos los candidatos quieren parecer más jóvenes hasta el punto de que hay quien actúa como si aún lo fuera, quien se mete filtros a lo Bill Clinton en su cartel para rebosar frescura y empaque, quien en sus fotos tiene ahora un resplandor beatífico y aspecto de buen chico y quien directamente parece haberse puesto más pelo y un poco de bótox.
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