El uso de la IA avanza muy despacio en las empresas regionales y solo llega al 6,8%

Incluso, si se compara con los anteriores datos oficiales en este apartado, correspondientes al año 2023, recogidos en un estudio del Consejo Económico y Social (CES) de la Región, publicado por LA VERDAD el pasado 18 de diciembre, se produce escasamente un avance de dos décimas, ya que se cifraba el porcentaje de uso de las empresas murcianas en un 6,6%. En cambio, es significativo que la media española ha pasado en esta evolución interanual del 9,5% al 11,4%.

Porque el hecho de que solo siete de cada cien firmas de la Comunidad incorporen esta tecnología disruptiva evidencia el largo recorrido que existe para progresar, sobre todo para alcanzar los niveles de los territorios líderes del país en su implantación, como son los casos de Madrid (15,7%), Cataluña (14%), País Vasco (12,4%) y Comunidad Valenciana (12,15%), según recogen los últimos indicadores ministeriales.

Las compañías murcianas se encuentran en los puestos de cola en uso de la IA, ligeramente por debajo de Castilla La Mancha (7,2%) y solo por encima de La Rioja (6,1%) y Canarias (5,1%), al margen de Ceuta y Melilla.

Sin embargo, es cierto que por lo que respecta a la incorporación de profesionales especialistas digitales y en tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en inteligencia artificial, la Región se sitúa en un puesto más intermedio en España. Aunque en todos los casos se trata de valores muy reducidos. En concreto, lo hace el 1,4% de pymes con diez o más empleados, exactamente la misma tasa que Galicia y Extremadura.

Por detrás, en disponibilidad de estos especialistas en IA se encuentran Navarra (1,2%); Canarias y Castilla La Mancha, con 1%, en ambos casos; Baleares (0,9%); Asturias (0,8%); Cantabria (0,5%); y La Rioja (0,4%), además de las ciudades autónomas.

Mientras que Madrid, con un 3% es la comunidad con el mayor porcentaje de empresas que cuentan con tecnólogos, seguida por Cataluña y País Vasco, con un 2,2%.

Y aunque es incuestionable que existe una enorme concienciación sobre el alto impacto que representa el uso de la inteligencia artificial generativa, hasta despertar cada vez más el interés de las empresas, tal como se demostró la pasada semana con el gran éxito de participación en el II Foro de la IA, organizado por la Cámara de Comercio de Murcia, tampoco se puede obviar que el nivel de adopción de esta tecnología evoluciona despacio. En este sentido, el modelo mayoritario de micropymes, con su tamaño reducido, supone un lastre que frena un mayor avance a la hora de usarla.

Existen distintos motivos detrás de la reticencia de las firmas a usar tecnologías de IA. En el conjunto nacional, entre las de 10 o más trabajadores que no las usan, el más habitual vuelve a ser la falta de conocimiento, expresado por el 78,9% de los consultados. El segundo argumento más esgrimido es la falta de claridad sobre las consecuencias legales del uso (49,2%). Otros motivos mencionados son las dificultades en la disponibilidad o calidad de los datos (48,3%), la percepción de altos costes (46,7%) y la preocupación por respetar la protección de datos (43,9%).

En cuanto a las diversas tecnologías de inteligencia artificial generativa más utilizadas por las empresas sobresalen las que realizan análisis del lenguaje escrito, llevado a cabo por el 44,7% de las compañías que usan la IA. También resaltan aquellas que automatizan diferentes flujos de trabajo o ayudan en la toma de decisiones (39%), así como las que generan lenguaje escrito o hablado (37,8%), que son las terceras más implementadas en el último año. Así se recoge en 'Indicadores de uso de inteligencia artificial en las empresas españolas 2025'.

El informe ministerial incide asimismo en relación a las empresas que utilizan IA, una mayoría del 28,7% -cerca del tercio- la usa tanto para marketing o ventas como para procesos de administración o gestión de la empresa.

Por debajo, con un 26,8%, aparece el aprovechamiento para procesos de producción. En esta categoría se enmarcan actividades como mantenimiento predictivo u optimización de procesos basado en el aprendizaje automático, herramientas para clasificar productos o encontrar defectos en productos basados en la visión artificial, drones autónomos para tareas de vigilancia de la producción, seguridad o inspección, o trabajos de montaje por robots autónomos.

Por otra parte, para hacer uso de la IA, las empresas necesitan 'software' desarrollado, del que disponen principalmente por tres vías: en formato de código abierto, a través de la adquisición de paquetes comerciales -mayoritaria, hasta en un 45,8% de los casos- y mediante proveedores externos.