Ver 39 fotos

Canasta del UCAM en el Palacio de los Deportes. José Luis Ros Caval/ AGM

Al UCAM le basta con poco para deshacerse del Hapoel

Los murcianos empiezan el 'top 16' ganando sin necesidad de sudar mucho, sacando su mejor versión solo a ratos

Martes, 23 de enero 2024, 23:33

Seguramente el 'staff' de Sito Alonso prefiera tener toda una semana para preparar el próximo partido de Liga Endesa, con el tiempo que requiere cada 'scouting' y con tiempo para que sus jugadores recuperen fuerzas y no estén expuestos a riesgo de lesión, como le ... pasó a Hakanson esta noche, que dijo adiós en el primer cuarto por un esguince de tobillo. Pero lo cierto es que la Champions League también tiene sus efectos curativos cada cuando, y esta noche lo pudo comprobar el UCAM, que, después de perder el pasado sábado ante un mejor Gran Canaria y bajar dos puestos en la clasificación (sexto) con una victoria menos de margen sobre los perseguidores al 'playoff', no tuvo que sudar en exceso para deshacerse de un Hapoel Holon bastante inferior.

Publicidad

UCAM Murcia

Hakanson (3), Ennis (16), Sant-Roos (4), Radovic (8) y Todorovic (6) -quinteto titular- R. Kurucs (4), Caupain (16), Falk (0), Sleva (5), Diagne (8), Jelínek (6) y A. Kurucs (2)

78

-

61

Hapoel Holon

Harris (17), Crawford (3), Dawson (2), Hanochi (4) y Smith (18) -quinteto titular- Burns (0), Vanwijn (9), Amir (0), Altshuler, Artzi (6) y Misgav (2).

  • Parciales: 13-11, 31-17 (44-28), 16-16 (60-44) y 18-17 (78-61).

  • Árbitros: Michal Proc, Kerem Baki y Mehmet Karabilecen.

  • Incidencias: Palacio de los Deportes de Murcia, 4.318 espectadores. 1ª jornada el grupo L del 'top 16' de la Champions League.

Y es que ya solo quedan los 16 mejores equipos de la competición en pie, pero el Hapoel no ofreció una resistencia digna de quien aspira a meterse en cuartos de final, si bien hubo momentos en los que se atragantó y mucho al UCAM. El caso es que esos minutos en los que el partido se le hizo bola al grupo de Sito Alonso pareció darse más por demérito propio que por mérito israelí, pues las ganas de volver a ganar jugaron la mala pasada de querer hacerlo antes de tiempo y bajar el pistón para entregarse a acciones más de cara a la galería o necesitadas de la tensión que no tuvo el partido de esta noche, en el que el UCAM se marchó al descanso ya cerca de la veintena de ventaja después de un inicio repleto de torpezas para ambos equipos.

Así, y a diferencia del AEK, que perdió en su visita al Promitheas (80-79), el UCAM sí defendió su condición de favorito en el grupo L del 'top 16' sin verse obligado a hacer su mejor partido. Y, por tanto, Sito Alonso pudo seguir usando la competición europea como banco de pruebas, de nuevo con un quinteto titular novedoso (Radovic y Sant-Roos teniendo a su lado a Hakanson) y con la intención de jugar mucho para Todorovic, al que le siguen quedando unas semanas para su puesta en forma total (y para ganar el respeto arbitral en Champions), y rotar con casi todos sus hombres. Salvo Hakanson, que cayó lesionado 30 segundos antes de terminar el primer cuarto y no podía apoyar el pie, y Falk, que apareció para cuatro segundos testimoniales, todos jugaron un mínimo de doce minutos, la marca de un menor de los Kurucs dubitativo y falto de confianza después de los 'banquillazos' de los últimos partidos.

En cuanto se quiso

Cinco pérdidas y nueve tiros fallados (con nueve triples intentados) eran dos ilustrativas estadísticas de lo que había sido el UCAM en el primer cuarto. Falto de intensidad, arriesgado en acciones sin fe y entregado a un lanzamiento exterior más circunstancial que buscado. Una fría manera de empezar el partido como la que también tuvo el Hapoel, que no parecía querer hacerse mucho daño esta noche en Murcia.

Publicidad

El UCAM espabiló después de un flojo arranque, con cinco pérdidas, nueve triples tirados y ningún tiro libre en el primer cuarto

Realizados los primeros cambios y arrancados los primeros cabellos de la cabeza de un Sito desesperado de lo que tardaba su equipo en carburar, se fue cogiendo el tono. La repuesta estaba donde solía estar para este UCAM, en la defensa, pues era donde todo empezaba para un equipo que se siente más cómodo cuando corre y menos cuando es forzado a jugar en estático, muy especialmente sin su 'cerebro', Hakanson.

Con el mayor de los Kurucs subió en intensidad como pura cuestión matemática, y después de unos minutos de alta incidencia por parte del letón, el UCAM tocaba su primera diferencia de diez puntos (25-15, minuto 14). Solo un minuto después, con el primer triple de un Caupain que recupera la sonrisa en Europa, el UCAM ya había anotado más puntos en la mitad del segundo cuarto que en todo el primero. El equipo volaba y, con el viento a favor, Todorovic aprovechaba su segunda oportunidad para coger la máxima diferencia hasta entonces (39-22, minuto 20) en la recta final de una primera parte que terminaba con cierta amargura después de tres faltas casi seguidas del montenegrino, la última de ellas muy discutida (44-28, descanso).

Publicidad

Apenas unos tirones más

En noches como hoy es cuando se demuestra el aura que va cogiendo el Palacio en esta Champions, donde el UCAM había ganado 19 de sus últimos 20 partidos. El Hapoel había vuelto de vestuarios sin fe ninguna, y los veinte de ventaja que se habían rozado ya estaban aquí (50-28, minuto 22). Con esa oficialidad de partido sentenciado que dan diferencias de este calibre es cuando precisamente el equipo dirigido por Amit Schaerf despresurizó su baloncesto, con C.J. Harris moviendo a los suyos como antes no lograba y, el sagaz Smith, uno de los pívots que más están dando que hablar esta temporada, añadiendo ahora músculo a su talento.

Los 31 puntos de un segundo cuarto en el que el UCAM logró correr dispararon el marcador y supusieron media victoria

La máxima diferencia alcanzada por el UCAM fueron los 24 puntos que puso una bandeja de Ennis, de nuevo el mejor (54-30, minuto 23), y ahí se clavó el UCAM. Un parcial de 0-10 de los visitantes hizo torcer el gesto a Sito, que encontró en la personalidad de Radovic la forma de mantener a raya al Hapoel (60-44, final del tercer cuarto).

Publicidad

Caupain pone la guinda

Después de habérselas visto tan felices minutos antes, como lo estaba Ennis tocando una guitarra eléctrica invisible mientras sonaba música en el Palacio, ahora el UCAM estaba que no daba pie con bola. Lo que quedaba de partido sería en el barro, especialmente después de que unos minutos de varias protestas, incluida técnica a Radovic, permitieran al Hapoel acercarse más y a Smith ganarse algún aplauso del público rival (66-52, minuto 35).

Noticia relacionada

Pero Caupain volvió y, en una competición que es su oasis particular, clavó dos triples consecutivos que desactivaron cualquier mínima alarma que estuviera preparada. Así, y sin tener que sudar la mitad que el sábado en Gran Canaria, el UCAM terminó con un autoritario resultado que le hace el primer líder del grupo L.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Infórmate con LA VERDAD: 1 año x 29,95€

Publicidad