La marcha de La Unión a Málaga, en manos del fútbol murciano, el andaluz y de la Junta Directiva de la Federación Española

Julián Luna, presidente de La Unión Atlético que milita en el grupo 4 de Segunda Federación, tiene muy claro desde hace meses que el futuro de su equipo está lejos de la población minera, y también de los límites regionales, y por eso ha solicitado en las últimas horas a la Federación Murciana de Fútbol la celebración de una asamblea extraordinaria para que este órgano de gobierno del fútbol regional le autorice a dar el salto a otra comunidad. Cabe recordar que dicha asamblea está formada por 70 miembros representativos de todos los estamentos del fútbol murciano, desde clubes a jugadores, pasando por entrenadores y también árbitros. Para que Julián Luna pueda avanzar en su objetivo, necesitaría apenas la mayoría simple (la mitad más uno) de los integrantes de dicha asamblea, que no se celebraría antes de 15 días desde la fecha de la convocatoria prevista para la próxima semana.

Esta aprobación del fútbol murciano es legalmente indispensable, aunque solo es el primer paso que debe dar el conjunto blanquiazul para lograr el cambio de domicilio a cualquier población fuera de los límites regionales. De hecho, seguidamente necesitará recibir el visto bueno de la comunidad donde pretende ubicarse, aunque la que decidirá en última instancia será la Junta Directiva de la Federación Española, como así recoge el punto 7 de artícluo 117 del Reglamento General de la organización que rige el fútbol español: «La Junta Directiva de la RFEF podrá autorizar que un club compita en un marco territorial distinto al que naturalmente le corresponda, previo acuerdo de las Federaciones de ámbito autonómico implicadas», asegura la norma, que también obliga a la asamblea, junta o consejo del propio club que solicita el cambio a aprobarlo internamente antes de iniciar cualquier procedimiento.

El propio Julián Luna, que desde hace meses gestiona el club junto al también abogado Daniel Pastor, dueño del CD Málaga 1903, propietario además del UD Torre del Mar, pretende el traslado del equipo blanquiazul a Málaga o alguna población de dicha provincia cercana a la capital de la Costa del Sol, aunque éste no tendría lugar hasta la próxima campaña 2025-26. Cabe recordar que desde hace años existe reglamentación para este tipo de cambios, no como cuando el Ciudad de Murcia de Quique Pina se trasladó a Granada tras la venta a Carlos Marsá en 2007, fecha en la que no existía reglamentación al respecto. Cabe recordar, además, que si finalmente Julián Luna apuesta por trasladarse a otra localidad pero dentro de la Región, solo necesitaría la aprobación de la propia directiva u órgano de gobierno del club y no de la asamblea de la Federación Murciana de Fútbol ni de la Junta Directiva de la española.