Diez minutos dramáticos descienden al Yeclano

El feudo azulgrana estaba lleno. Los aficionados fieles al Yeclano no abandonaron a su equipo y respondieron. Era una cita clave y todo parecía ir a pedir de boca cuando Antonio Sánchez adelantó a los locales tras un gran remate de cabeza. Tranquilidad en el conjunto de Adrián Hernández, que se marchó al descanso con los deberes casi hechos. Pero la tranquilidad se convirtió en una confianza desmesurada que le acabó costando muy caro a los pupilos del técnico de Churra.

A la vuelta de vestuarios, el Yeclano se echó atrás y se empeñó en defender su guarida en vez de buscar el segundo tanto que sellara la permanencia. Las oportunidades del Intercity se sucedían al mismo tiempo que los goles de los rivales por la salvación llegaban en otros campos y sonaban en las gradas. Se jugó poco o nada al fútbol en los segundos 45 minutos. Poca intensidad local y un miedo excesivamente grande terminaron por sentenciar al Yeclano.

Pasaban los minutos y la alegría se mezclaba con tensión y nerviosismo. Todo estalló por los aires cuando primero Caballo, en el minuto 83, y luego Montero, a uno del final, anotaron para los alicantinos y castigaron con fuerza a los del Altiplano. Ya no quedaba tiempo para darle la vuelta al marcador. Los rostros de los futbolistas, técnicos, directiva y aficionados reflejaban el golpe que acababan de recibir: estaban preparados para celebrar y lo que empezaron a caer fueron lágrimas de triteza.

Los jugadores saludaron a la afición a pesar de la derrota. El esfuerzo pudo valer la pena, pero no fueron capaces de ganar el partido más importante de la temporada, y posiblemente de la historia de la entidad. Con el presupuesto más bajo de la categoría, un equipo formado en su mayoría por futbolistas procedentes de Tercera RFEF tuvo un final de película de terror que debe hacer pensar a muchos.

La falta de consistencia como local, la escasa pegada en momentos clave, la poca experiencia en las piernas de los jugadores, el escaso talento y diez minutos dramáticos en un duelo clave ponen el último clavo del ataúd del Yeclano, que desciende a Segunda Federación y vuelve a caer a la cuarta categoría del fútbol español.