Joel-Peter Witkin, el ojo que eleva lo macabro a la categoría de arte

El término «naturaleza muerta» se torna perturbadoramente literal al hablar del arte de Joel-Peter Witkin. En la obra del fotógrafo norteamericano son recurrentes los bodegones que incluyen despojos de cadáveres. Se trata de imágenes impactantes, desde luego, pero una vez superado el espanto inicial transmiten una extraña placidez en el espectador, quizá por el mimo con el que Witkin prepara sus escenografías o por su manera de manipular los negativos de forma analógica para impregnar un hipnótico onirismo en el resultado final.

Los tabúes no existen en la producción de un artista obsesionado con sacar a la luz las realidades que nadie quiere ver. Muerte, dolor, parafilias, mutilados, hermafroditas, enanos... Sus fotografías consiguen encontrar belleza en realidades que la sociedad habitualmente encuentra repulsivas o desagradables.

Hasta el próximo 8 de junio el espacio Two Art Gallery propone al público murciano adentrarse en el singular imaginario de Witkin a través de una exposición que recopila algunas de sus piezas más representativas. Un 'Teatro di Morte' fascinante que, a cambio, solo exige algo de estómago y dejarse los prejuicios en casa.