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Mantenlo prendido
Opinión

Mantenlo prendido

Mesa para cinco ·

Esa ilusión que la vida-caja había filtrado por las esquinas y que creías perdida, sigue ahí. En el plato. Y la dueña japo no te deja pedir más sin acabar esa

Domingo, 19 de mayo 2024, 07:45

Cuando la ilusión vuelca es complicado recogerla y volver a echarla al vaso. En Kioto, tras largos paseos entre tiendas de segunda mano y con el ánimo inflamado de imágenes de neón, cañas de bambú y esas cosas, paramos a tomar un qué sé yo ... en una izakaya del centro. Dani se hace el nipón y riega las viandas con sake, por favor, gracias, luciendo en voz alta un perfecto castellano. El sake se sirve de manera tradicional en unos recipientes rectangulares que eran, parece ser, fetén para el transporte y la mar de apilables. Pero cómodos no. Los palillos tienen sentido en un arroz apelmazado gracias al vinagre y en una dinámica de platos pequeños con poco caldo aptos para ser cazados como cazaba moscas el maestro Miyagi. Pero lo de los vasos-caja ellos saben que no funciona. Por eso te ponen debajo un plato. Nosotros debajo de los vasos ponemos posavasos, ellos debajo de esos recipientes cuadrangulares ponen platos. Es una aceptación tácita del error. Bueno la tradición es así, ya está.

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