

Bill Zygmant: «John Lennon sabía que yo era una persona de fiar»
El fotógrafo inglés, afincado desde hace una década en el Valle del Sol, en Murcia, tomó la primera imagen conocida del cantante y compositor con la artista japonesa Yoko Ono
La vida del londinense Bill Zygmant está íntimamente ligada a la historia de los Beatles, la banda más célebre de la historia de la música. ... Él fue uno de los fotógrafos de confianza de John Lennon, Paul McCartney, George Harrison y Ringo Starr, desde la constitución del grupo en Liverpool en 1960 hasta su disolución en 1970. Diez años en los que Zygmant consiguió las mejores imágenes de estos cuatro tótems culturales que hoy, medio siglo después de separarse, siguen apareciendo en el número 1 de las listas de los mejores artistas de todos los tiempos.
Pero aquella fue una vida. Esta última década su lugar en el mundo, como para tantos británicos, es la Región de Murcia. Sí. Mr. Zygmant tiene hoy 82 años y vive apartado del mundo en una casa con paredes naranjas y jardín de chinarro en la pedanía murciana de Gea y Truyols, en el Valle del Sol, donde recibe a LA VERDAD para compartir algunos recuerdos de aquellas dos décadas, los 60 y los 70, en las que tuvo acceso a la intimidad de algunos de los personajes más icónicos de la cultura musical del siglo XX, como Jimi Hendrix (1942-1970), tenido por uno de los guitarristas más influyentes de la historia del rock.
El fotógrafo vive apartado de los focos desde hace décadas. Y, pese a sus dificultades de audición y visión, evoca sin morriña aquella juventud entre las hordas de fans cuando ante su cámara posaban, antes que por la de ningún otro reportero, las más relucientes estrellas del firmamento.
-kflE-U15085008981478G-624x385@La%20Verdad.jpg)
Admiración
De lo primero que quiere hablar el fotógrafo es de un libro. Su portfolio. 'Where did you get that shirt?' (¿dónde conseguiste esta camisa?', que despliega suavemente, con la delicadeza del diamantista que descubre sus joyas en un rollo plegable de terciopelo. Los fotógrafos Javier Carrión y Anatoliy Hlodan, entusiastas de Zygmant, han mediado para el encuentro. Han coincidido en otras ocasiones con él, le tienen en un altar. Suzanne, la segunda esposa de Bill, permanece en el interior de la casa con sus tres perros de compañía. Ella nos advierte de que «no oye muy bien», pero aún así el fotógrafo se hace entender.
Sin pronunciar una palabra en español, Bill se declara forofo del ritmo de vida en España. Por eso fue que quiso instalarse primero en Avileses antes de pisar el Valle del Sol. Sobre ese libro que tiene entre manos dice que oficialmente no está en el mercado, aunque algunas copias andan por internet como piezas de coleccionista. «¡Ya va por casi cien pavos!». Ahí están las mejores obras de su vida artística, desde 1960 hasta 1980: 20 años fotografiando al 'star system'. Doscientas fotografías originales, 60 de ellas de los Beatles, y, por supuesto, la primera imagen que hay de John Lennon y Yoko Ono en Reino Unido. También las primeras de Jimi Hendrix con su banda The Experience Musicians, y de artistas y 'celebrities' como Bee Gees, Status Quo, Marc Bolan, Bananarama, Rod Steward, Grace y Rainiero de Mónaco, Marianne Faithfull o incluso Arnold Schwarzenegger. Una treintena de ellas ya las mostró en 2013 en el Centro de Iniciativas Turísticas de San Pedro del Pinatar, en su primera exhibición en la Región de Murcia.
Complicidad
Lennon y Yoko tenían complicidad con Bill Zygmant, quien ya conocía a la japonesa y a su segundo marido, Anthony Cox, del que se divorció en 1968. Un año después, en 1969, la artista conceptual y el cantante y compositor contraerían matrimonio en Gibraltar. Zygmant fue quien capturó la primera imagen conocida de la pareja. Fue meses antes del anuncio de su enlace. Yoko Ono, con su cabellera negra suelta y en pantalón, aparece en un segundo plano mientras Lennon posa para Bill con un abrigo en la inauguración de una sastrería en Londres.
-kflE-U150850089814UoH-624x385@La%20Verdad.jpg)
Aquella imagen fue tomada en 1968. «John me llamó un día para que le hiciera unas fotos y en ese acto, ella estaba detrás y yo la reconocí –cuenta a LA VERDAD–. Yo conocí a Yoko antes que John Lennon, por su marido Tony, que era productor de cine. Yo estaba haciendo entonces un documental en Londres y así fue como entramos en contacto, unos años antes de ella intimara con John».
Dice Zygmant que esta es una historia de tantas, pues durante los dos años siguientes volvieron a coincidir bastante, hasta que en 1971 la pareja fija su residencia en Nueva York, donde formarían un hogar y donde Lennon sería asesinado de cuatro disparos el 8 de diciembre de 1980 a la entrada del edificio Dakota.
En ese libro que cita, «y que no fue pensado para exhibir lo que la gente espera de mí sino las imágenes que yo como fotógrafo considero más importantes para él», obviamente esa primera escena de Yoko Ono y Lennon no podía faltar. «Él me contactó a mí porque en aquellos días era importante para él la gente en la que podía confiar. Cuando tú fotografías a una estrella de esta categoría es importante este factor. Por supuesto que hice dinero», afirma. Por algunas fotografías, revela sin pudor, las revistas y los diarios le pagaron «a lot of money», «mucho dinero». «A veces más de 60.000 y 70.000 libras».
-kflE-U1508500898147qG-624x385@La%20Verdad.jpg)
«Yo hacía muchísimas fotos, claro. Ellos vivían siempre 'in a hurry' (apurados), rodeados de gente. Y yo era amigable, confiable, para ellos. De hecho, les hice las últimas fotos antes de que ellos se instalaran en América en 1971. Aparecen abrazados, realmente con un aire muy natural, y después de tirar unas cuantas, John me hizo una señal, entendía que era ya suficiente, y paré. Si alguien me pregunta si ellos estaban enamorados, diría que sí. Podías darte cuenta de eso cuando yo guardaba la cámara».
Es la misma confianza que se respira en los retratos a Jimi Hendrix, «a quien le hice las mejores fotos que vayas a encontrar de él», presume con franqueza. En una ocasión, rememora, «Jimi estaba borracho y quiso que le fotografiara, pero le dije que no, que mejor me llamara al día siguiente. Hicimos juntos las primeras imágenes que tiene con su grupo en Londres». Hendrix murió el 18 de septiembre de 1970 a los 27 años en una habitación de hotel en circunstancias no del todo aclaradas.
-kflE-U150850089814v0D-624x385@La%20Verdad.jpg)
En distintas ocasiones tuvo la oportunidad de seguirles, tanto a los Beatles como a Hendrix, como freelance. «Yo en ese tiempo, en los años 60 y 70, era un profesional muy ocupado todo el tiempo». En realidad, hizo lo que quería hacer, pues ya con 8 años quería dedicarse a la fotografía. En el mentado libro cita que el padre de una amiga suya trabajaba en el diario Evening Star en Londres. Un día recibió una llamada: «Ven a vernos». «Yo era solo un crío, pero aprendí mucho, todo, de aquellos fotógrafos de prensa. Por entonces yo salía y hacía también mis propias fotografías y ellos me ayudaron a publicarlas. Me pagaban al principio 2,90 libras por cada foto, así empecé yo». En cualquier caso, todavía desconocía en esa época que no todo iba a ser tan idílico. De muchas de sus obras ni conserva los derechos, que quedaron en manos de agencias de prensa.
Hacerles sentir especiales
«Mucho tiempo después de retirarme alguien descubrió en internet que yo había sido fotógrafo, y que había estado rodeado de esta gente, y debo decir que disfruté haciendo algunas exposiciones, pero ya no más. En estos últimos años he estado trabajando en este libro. Puedo decirte que como fotógrafo lo más importante es hablar con la gente, y hacer que ellos se sientan especiales. Solo después tú puedes conseguir las mejores imágenes».
-kflE-U150850089814s0H-624x385@La%20Verdad.jpg)
Algunas de esas escenas que Bill Zygmant tiene muy vivas en su imaginario corresponden, por ejemplo, a las sesiones que hizo con el psicodélico Rolls Royce de John Lennon, o con la caravana gitana que compró para su hijo Julian. O bien a las célebres chicas que protestaban desnudas en el puente de Westminster. «¡No todo fueron los Beatles!», incide. «Aunque hay muchas fotos de ellos a las que le tengo cariño, especialmente a las de George Harrison, honestamente él era mi favorito de la banda. Claro que disfruté con mi trabajo, pero viajar cada día, mañana y noche, y estar en la carretera una y otra vez no era para mí. Así que estuvo bien hacerlo por 20 años».
Bill trabajó en la primera televisión universitaria de Reino Unido, enseñando video y fotografía en el Coventry's Tile Hill College, fue editor de fotografía para Rover en Midlands y manager de bandas como Imagination. Una vida profesional que hoy, a sus 82 años, desde el Valle del Sol, recuerda sin creerse especial. Aunque, en el fondo, sepa bien que lo es. Un fotógrafo amigable, de los de fiar.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.