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C. García
Jueves, 24 de agosto 2017, 14:07
Tras el atentado terrorista de Barcelona de hace una semana, se ha difundido en la sociedad un miedo irracional a los árabes. La portada de 'El Jueves' de ayer daba una lección al mundo para demostrar que la unión de todos, incluídos los musulmanes, hace la fuerza. Pero en la cara opuesta de la moneda estaba la portada de Charlie Hebdo, que se empeñaba en promover el odio al islamismo.
Estos días, un musulmán trata de acabar con esa islamofobia que alimenta al yihadismo y al terrorismo islámico. Lo hace dando abrazos en el lugar cero del atentado de Barcelona: Las Ramblas. Con ese simple gesto este hombre quiere demostrar que no todos los árabes son terroristas: «Soy musulman, no terrorista y reparto abrazos», es lo que reza su cartel con el que pretende difundir un símbolo de paz y amor.
Cientos de personas apoyaron a este hombre y le devolvieron el abrazo en un claro gesto de unión entre culturas. No es la primera vez que un musulmán decide llevar a cabo esta iniciativa de dar abrazos en plena calle, en París y Manchester otros también lo hicieron.
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