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La antigua Fuente del Oro, que data de 1741 y está catalogada como bien protegido, presenta un gran abandono casi enterrada entre matorrales y agua estancada. :: Paco Alonso/AGM
El agua y la suciedad cubren la antigua Fuente del Oro
LORCA

El agua y la suciedad cubren la antigua Fuente del Oro

Fue reconstruida en 1743 y definitivamente abandonada tras la riada de 1973, a pesar de estar incluida en el catálogo de bienes protegidos

A. S.

Jueves, 23 de enero 2014, 21:12

La maleza, la suciedad y el agua estancada es el panorama que ofrece la que otrora fue uno de los complejos hidráulicos más interesantes del casco urbano, la Fuente de Oro, y que tiene el grado de protección integral en el Plan General Municipal de Ordenación de 2002, dentro del catálogo de bienes protegidos. Esa es la teoría, porque en la realidad la protección es nula desde hace años. Ahora, después de varios meses sin llover, el encharcamiento es enorme.

No es la primera vez que es noticia en los últimos años la acumulación de agua procedente de la Fuente del Oro que, a pesar del abandono, sigue aportando un caudal que se estima en torno a los 18 litros por segundo. Las consecuencias medioambientales para la zona por el estancamiento del agua son más notorias en los meses de calor, con la proliferación de mosquitos y malos olores. Además los matorrales son cada vez más abundantes.

Puestos en contacto con la Concejalía de Obras su titular, Ángel Meca, deriva el problema a la Comunidad de Regantes, que «es la que utiliza el agua de esta fuente», pero un portavoz del organismo de los regantes rechaza la responsabilidad y explica que «nosotros tomamos el agua desde el muro del río y hemos comprobado varias veces que nuestra tubería funciona con normalidad».

En opinión de la Comunidad de Regantes el atasco que impide que el agua de la Fuente del Oro llegue en su totalidad al río debe estar en tramo de conducción que va desde dicha fuente al Guadalentín, y que atraviesa bajo un edificio construido hace pocos años. «Nosotros no tenemos ninguna documentación en relación con los condicionantes que Urbanismo estableció en su día para otorgar la licencia de obras y, entre las que debió estar, el sistema de evacuación de la Fuente del Oro. Entonces no se contó con los regantes».

Revisión del proyecto

La Concejalía de Urbanismo, por su parte, según el concejal José Joaquín Peñarrubia, está revisando la documentación relativa a esta zona para intentar averiguar cómo se planteó en su momento la solución de la tubería que lleva el agua de la fuente hasta el río, con el fin de intentar averiguar si existe algún obstáculo que impida el normal paso del agua, y ese sea el motivo del encharcamiento.

El edificio junto a la Fuente del Oro tiene dos plantas de sótano, por lo que la segunda está a un nivel más bajo que el complejo hidráulico. Los vecinos indican que hay zonas del inmueble en las que se aprecia la humedad, que cabe atribuir a las filtraciones del agua estancada.

En el año 2001 el Ayuntamiento aprobó un proyecto de ordenación de la zona de la Fuente del Oro, junto a la avenida de Santa Clara, de la que había desaparecido la antigua lonja que sustituyó en 1966 al lavadero municipal. Esta ordenación, auspiciada por el entonces gobierno municipal socialista, se justificó por ser un punto de conexión con la pasarela Manterola y crear una mejora de este espacio urbano.

Lo único que se hizo fue autorizar dos nuevos edificios, pero la Fuente del Oro siguió olvidada, aunque en el año 1989 se habían iniciado los trámites para su declaración como Bien de Interés Cultural. Cuando el gobierno de la ciudad cambió de signo político la fuente siguió en el progresivo estado de abandono. El solar dejado por las lonjas se rellenó de tierra con la intención de hacer un parque que no se ha materializado, y la hondonada donde está lo que queda de la Fuente del Oro ofrece un espectáculo total de abandono. Y lo peor es que nadie quiere hincar el diente a este problema.

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