Borrar
Juan Gorreta, tocando la guitarra en la plaza Circular de Murcia, ayer. :: GUILLERMO CARRIÓN / AGM
«Me basta con ganar unos siete euros al día para vivir»
REGIÓN MURCIA

«Me basta con ganar unos siete euros al día para vivir»

JUAN RUIZ PALACIOS

Viernes, 29 de noviembre 2013, 01:39

Pasa una joven, de unos 20 años, mientras Juan canta sin cesar. Cuando llega a su altura, se detiene, introduce su mano en el bolsillo del pantalón y saca un euro para dárselo a este mendigo. Mientras, él aprovecha y se levanta, le da dos besos y le exclama sonriendo: «¡Pero qué guapa estás...! ¡Muchas gracias!».

La vida de Juan Gorreta Moreno, de 50 años y natural de Los Ramos, no es nada fácil, pues necesita cantar y pedir en la calle para poder comer. No obstante, este murciano se conforma con conseguir siete u ocho euros al día. «Toco la guitarra para ganarme la vida, porque tengo una minusvalía y no me dejan trabajar».

El dinero que gana Juan mientras araña la guitarra en la plaza Circular se lo da a su hermana, con quien convive. «Ella es la que se encarga de hacer la comida y de que no falte nunca de nada», asegura sonriendo.

A pesar de mostrarse feliz en todo momento y de piropear a todas las chavalas que se cruzan con él, Juan no puede evitar ponerse serio y triste cuando recuerda que, hace 20 años, su mujer lo abandonó y se llevó a sus cuatro hijos. «Mi vida ya no ha vuelto a ser la misma, y no lo digo por mi minusvalía. Mi mujer me dejó. Tuve que irme a casa de mi hermana para no quedarme en la calle. Después de tener varios problemas de salud bastante graves -estuvo ingresado once meses por un problema en la columna-, decidí venir a Murcia para ganarme la vida con la guitarra, que es lo que me gusta», relata. «Aquí sigo y aquí estaré. Creo que no molesto a nadie».

Al igual que cualquier trabajador, este mendigo tiene un horario que cumple a rajatabla. «Me despierto muy temprano para no perder el autobús. Sobre las ocho de la mañana ya estoy dándole a la música, y mi jornada termina a las cuatro de la tarde».

Una vez que enfunda la guitarra, regresa a casa de su hermana y le entrega el dinero que ha ganado. Un plato de potaje le espera en la mesa. «A veces hace lentejas, otras veces habichuelas... Luego ya por la tarde juego a las cartas con mi sobrino. Incluso algunas veces nos vamos por ahí a dar un paseo...».

De sol a sol, día tras día

«Cada día es distinto. Trabajo como cualquier otra persona», asegura ilusionado, pues Juan es de los que piensan que «para ser feliz no hace falta otra cosa que hacer lo que a uno le gusta y conformarse con lo que cada uno necesita». Y concluye: «No me gustan los lujos. Soy feliz así, con mis manos destrozadas de tanto tocar esta guitarra».

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

laverdad «Me basta con ganar unos siete euros al día para vivir»