Serafín de Alba: «Cuando se fueron me dejaron dos sierras eléctricas y un hacha»

En su declaración ante la Policía Nacional, prestada el pasado 27 de mayo en calidad de imputado, Serafín de Alba y Luis reconoció que el día 15 de mayo su amigo Luis Cuenca se presentó en su casa de huerta de Alquerías, acompañado por dos individuos que identificó como del Este de Europa. Cuenca le habría dicho que sus acompañantes iban a quitarle del huerto el tocón de un limonero seco, que en apariencia llevaba tiempo pensando arrancar, y él accedió a que lo hicieran. Serafín de Alba reconoció que en un momento dado observó que los dos coches en los que se habían desplazado Cuenca y los rumanos llevaban el maletero lleno de bolsas de basura, así como dos cubos grandes de color negro, y que desprendían un mal olor a desperdicios y a humedad. Al ser preguntado por los agentes si eso no le causó extrañeza, se limitó a asegurar que no.

Finalmente declaró que cuando Cuenca y sus dos acompañantes se marcharon, después de haber estado trabajando en el huerto, le dejaron allí los dos cubos negros de basura, así como dos motosierras y un hacha. Ese material fue en apariencia intervenido por los agentes de la UDEV durante un registro realizado en la vivienda de Alquerías. Luego fue mandado a analizar en busca de restos de ADN que permitieran confirmar que fueron los útiles empleados para descuartizar los cadáveres.

El resultado de algunas investigaciones practicadas por los investigadores apunta a que el conocimiento por parte de Serafín de Alba puede ser mayor de lo que habría admitido, lo que ha llevado a la juez a encarcelarlo.